La ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra, quien ha intervenido este jueves en Pamplona en la jornada "El Futuro de la Desigualdad y la Pobreza", ha asegurado que la forma de repartir la riqueza "tiene nombre y apellidos" y es la justicia fiscal.

Belarra, quien ha participado en la mesa redonda "Pobreza y desigualdad en España. ¿Hacia dónde vamos?", ha declarado que la pandemia de covid-19 "ha permitido aprender algunas lecciones sobre qué son las crisis económicas".

La principal lección, ha dicho, es que las crisis "no son fenómenos naturales", sino que "tienen que ver con las decisiones que toman las administraciones públicas" y en este sentido el Gobierno español ha demostrado "que se podía proteger a la gente y que además eso es más eficiente a nivel económico".

Este "no es un debate sobre ideas, es un debate sobre datos", ha señalado la ministra.

Otra lección extraída de esta crisis, ha manifestado, es que la desigualdad "no es un subproducto de nuestro sistema económico", sino que es un "rasgo fundamental" del neoliberalismo, que propugna que, si le va bien "a los superricos", le irá bien al resto de la sociedad y "se ha demostrado que ese mito es falso".

Repartir la riqueza, ha agregado, "tienen nombre y apellidos muy claros, que es la justicia fiscal". España, ha recordado, está en ese sentido "muy lejos", a siete puntos, de la media de la UE.

Sobre la idea de que crear empleo es la mejor política social, ha comentado que ése "es el argumento que más se usa desde partidos de derechas", ya que el trabajo "es importante para que tengamos sociedades más justas y hagamos frente a la desigualdad", pero "no cualquier tipo de empleo".

"Tenemos que apostar por la creación de empleo y por una transformación del modelo productivo", pero también por la mejora de sus condiciones, ha apuntado la ministra, quien ha resaltado que la subida del SMI "se ha demostrado como una medida de protección social de enorme valor".

El empleo, ha añadido, "no es la única ni siquiera la principal herramienta de protección social", ya que también son importantes medidas como las relativas a la garantía de rentas.

También ha puesto en valor el papel del feminismo, porque "tenemos una sociedad en la que el empleo tiene una preponderancia a la hora de luchar contra la desigualdad" y eso "está muy bien, pero no todo el trabajo es empleo".

"Hay una parte muy importante del trabajo que es invisible, que es el trabajo de cuidados", que ha recaído fundamentalmente "sobre los hombros de las mujeres" y por ello, ha subrayado, hay que avanzar hacia "una necesaria corresponsabilidad a distintos niveles".

Otra herramienta contra la desigualdad, ha precisado, son los Presupuestos Generales del Estado, y al respecto ha opinado que la mayoría de partidos que propiciaron la investidura "sabe que estos son unos buenos presupuestos".

La ministra ha confiado en que "podamos obtener esos 189 votos" para los Presupuestos de 2022.

Al ser preguntada por su deseo para 2022, ha apostado por que el IMV "estuviera integrado a pleno rendimiento" y se pueda complementar con el nivel autonómico, por ejemplo transfiriendo su gestión a Navarra. EFE

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