La consellera de Justicia de la Generalitat, Ester Capella, ha presidido hoy el entierro en un nicho del cementerio de Prats de Lluçanés (Barcelona) de los restos de 18 soldados no identificados, probablemente republicanos, que fueron hallados en una fosa común de la Guerra Civil.

Se trata de los primeros restos de una excavación del Plan de Fosas de la Generalitat que reciben una sepultura digna en el pueblo donde fueron encontrados, de acuerdo con los que establece la ley de memoria histórica, que dicta que las víctimas no identificadas ni reclamadas deben ser enterradas en los cementerios de los municipios donde fueron halladas.

Los restos de los 18 soldados fueron encontrados en una fosa de la sierra de Sant Sebastià y en la fosa del antiguo cementerio de Sant Andreu de Llanars.

Según los historiadores, se trata de 18 soldados no identificados, muy probablemente del ejército republicano, que en febrero de 1939 lucharon en los combates que hubo en el pueblo entre las tropas franquistas y las fuerzas republicanas durante la Guerra Civil.

Los esqueletos de los soldados han estado, desde que fueron exhumados, en la Universidad Autónoma de Barcelona, donde les hicieron un estudio antropológico y extrajeron ADN por si en el futuro el Programa de identificación genética permite averiguar la identidad de las víctimas.

Este Programa cruza el ADN de los restos óseos con el de posibles familiares vivos para ver si hay coincidencia.

Estos soldados, de momento, no han podido ser identificados, a pesar de que su ADN se ha cruzado con las casi 2.000 muestras genéticas de familiares vivos con los que cuenta el Programa.

Los restos fueron encontrados durante las excavaciones que se hicieron en agosto de 2017 en el pueblo a raíz de la puesta en marcha del Plan de fosas, que, desde enero de ese año, permite al Govern actuar de oficio en el apertura de fosas para identificar a las víctimas y enterrarlas de nuevo dignamente.

Al acto del primer entierro digno de víctimas de la Guerra Civil hallados en fosas en Cataluña también ha asistido el alcalde de Prats de Lluçanès, Isaac Peraire.

El Departamento de Justicia ha informado de que tiene previsto en los próximos meses enterrar dignamente restos en Vilanova de Meià, El Soleràs, Figuerola de Orcau, Castellar del Vallès y Cassà de la Selva.