Trece semanas de gestación, veinte gramos de peso y un tamaño comprendido entre cinco y siete centímetros. La Policía Nacional sigue investigando el hallazgo de este feto, localizado sobre las diez y media de la noche del pasado viernes día de la Constitución, junto a unos contenedores de basura en pleno corazón del barrio de Malasaña. En concreto, el feto apareció dentro de una bolsa en la confluencia de la calle de la Palma con la costanilla de san Vicente, no muy lejos de la plaza del Dos de Mayo.

Fue un vecino quien encontró el feto dentro de una bolsa y dio aviso a la policía. De inmediato se presentó en el lugar de los hechos una comisión judicial acompañada de varias unidades policiales. El juez de guardia autorizó posteriormente el traslado del feto al Instituto Anatómico Forense.

En un feto de trece semanas como este, los dedos ya están perfectamente separados y tiene flexibilidad tanto en las rodillas como en los codos. Los intestinos ya se encuentran en la parte interna del cuerpo, dentro del abdomen del feto y no en el interior del cordón umbilical. Además, el rostro empieza a ser reconocible.