Serán unas Navidades con más adornos, con calles más iluminadas y con más belenes. El Ayuntamiento de Madrid ha aumentado cerca de un 28 % el presupuesto en alumbrado porque fomenta el turismo, las zonas comerciales y la riqueza económica de la ciudad, según ha dicho la delegada de Obras y Equipamientos Paloma García Romero que ha puntualizado que habrá más calles iluminadas con un nuevo diseño.

Vuelve el Belén figurativo que Carmena retiró de la Puerta de Alcalá. Además se instalarán otros en cuatro en Puerta de Toledo, Puerta de San Vicente, Plaza Mayor y el Viaducto de Segovia. De esta manera, ha explicado García Romero, se vuelve a la tradición que pedían muchos madrileños que de manera espontánea colocaban sus propios belenes en la Puerta de Alcalá.

Los motivos y arcos luminosos, además de en los emplazamientos habituales, serán ubicados en plaza de Canalejas, calle Atocha, Puerta de Toledo, Puerta de San Vicente, entradas a la plaza Mayor, el viaducto de la calle Toledo, la plaza de Cibeles, la de Neptuno, la glorieta de Cuatro Caminos. Habrá diseños nuevos en calle Mayor, Montera y carrera de San Jerónimo.

Habrá cadenetas, por primera vez en el eje Alberto Aguilera-Sagasta-Carranza-Génova, la plaza de Alonso Martínez, la glorieta de Bilbao, la de Ruiz Jiménez, la calle Atocha, la de Alcalá, la calle Conde de Peñalver, plaza de Oriente, calle Ferraz, calle Marqués de Urquijo, Princesa, Orense, calle del Poeta Joan Maragall y calle Pérez de Victoria.

Las nuevas ubicaciones de los cerezos iluminados serán la glorieta de Emilio Castelar, plaza de Legazpi, calle Montalbán, Cuzco, plaza de Lima, glorieta de Rubén Darío, plaza del Marqués de Salamanca, glorieta de Ruiz Jiménez, plaza de Alonso Martínez y glorieta de Quevedo. Por su parte, Madrid Río, Plaza de Castilla y plaza de Oriente contarán con abetos.