Sánchez en Kiev

Sánchez comienza la presidencia de turno de España en Kiev. Es el mejor lugar para hacerlo. Afortunadamente el presidente del Gobierno, desde que comenzó la invasión, ha mantenido una posición clara, en línea con la mayoría de los socios de la UE, sobre el apoyo a la integridad territorial de Ucrania. No se ha dejado contaminar por la injustificable equidistancia de sus socios de Gobierno.

Empieza la presidencia española con dos cuestiones sobre la mesa: los posibles avances para la integración de Ucrania en la UE y el apoyo al pueblo ucraniano y a la lucha en el campo de batalla. Para que siga adelante el proceso de integración de Ucrania en la UE, es necesario que avance en la independencia judicial, en la lucha contra la corrupción y el blanqueo de dinero. En otoño se presentará un informe sobre las medidas tomadas en estas cuestiones. El gobierno ucraniano está presionando para iniciar las negociaciones antes de fin de año La presidencia española no puede acelerar un proceso que está reglamentado.

La OTAN asegura que lo más urgente para Ucrania es recibir apoyo militar. La reciente asonada protagonizada por Wagner ha añadido más inseguridad. La UE y sus países miembros han aportado ya 75.000 millones de euros en ayudas tanto para reforzar los suministros militares como para garantizar que la economía ucraniana siga a flote. La tarea es mantener a los socios unidos y que no se extienda la fatiga que provoca la guerra.