Nicolás Redondo Terreros ha concedido una interesante entrevista al diario ABC, en la que el histórico miembro del PSOE explica, con la libertad y valentía que le caracterizan, cómo ve la situación de España. Redondo afirma que un gobierno de socialistas y comunistas perjudica tanto a España como al propio PSOE, y que sería deseable que PSOE y PP lograran acuerdos para afrontar los asuntos neurálgicos, y para que la gobernabilidad no dependa de los nacionalistas.

Crítico con la deriva de su partido desde la época de Zapatero, Nicolás Redondo afirma que el debate interno debería ser un bien a proteger. Lamenta además que, desde el gobierno, se haya recurrido a EH Bildu, por la legitimación que supone del terrorismo y la humillación a las víctimas. Querer justificar esto desde argumentos meramente posibilistas nos sitúa de forma radical en la lógica de la política del poder, una premisa que, de llevarse hasta sus últimas consecuencias, acaba por destruir las democracias.

Redondo llama a repensar la izquierda española. Con el Congreso Federal de octubre en el horizonte, el PSOE tiene una nueva oportunidad de hacerlo. Aquella izquierda de la que habla Redondo Terreros, con todos sus defectos y sin idealizar el pasado, era, en sus propias palabras, dueña de un optimismo ilustrado. Ahora, sin embargo, su discurso se asienta sobre el revisionismo histórico, el pesimismo y la creación artificial de una serie de conflictos que, como reflejan las políticas del gobierno de Sánchez, están dispuestas a sacrificar el bien común con tal de garantizar su supervivencia política.