Sin hijos no hay futuro

Ya puedes escuchar la Línea Editorial de esta tarde del 8 de julio

Embarazo
00:00

Redacción digital

Madrid - Publicado el

1 min lectura

Solo el 23,6 % de los hogares de la Unión Europea conviven hoy con, al menos, un menor. Dicho de otra manera, en dos de cada tres hogares europeos no hay hijos. Los datos de Eurostat son más que una estadística; son un aldabonazo a la conciencia del viejo continente. Detrás de estos números hay una verdad dolorosa: Europa ya no quiere tener hijos. Y no solo porque no pueda, sino sobre todo porque ha dejado de valorar la vida, de confiar en el amor duradero y en la entrega generosa de formar una familia, porque se ha desdibujado la esperanza.

Hay graves causas económicas, pero no son las principales, y cuando se analiza en serio lo que sucede, ya pocos dudan de que estamos ante una profunda crisis de sentido y, por lo tanto, de esperanza. El hombre que se mira al ombligo no se siente llamado a dar la vida. Al quitar a Dios del horizonte personal y comunitario, como se ha demostrado tantas veces en la historia, la ideología del supuesto progreso se vuelve contra el propio hombre dejándolo vacío y exhausto. Cuando se arranca de raíz el sentido trascendente de la vida, cuando se desprecia la familia y se glorifica el individualismo, el resultado es esta soledad demográfica.

Las políticas natalistas, sin un cambio cultural y moral, son solo parches. Necesitamos recuperar el valor de la vida, de la entrega y de la esperanza. Mientras tanto, incluso los más escépticos lo reconocen: sin hijos, Europa puede morir. Así de claro y así de crudo.

Programas

Último boletín

12:00H | 11 JUL 2025 | BOLETÍN

Boletines COPE
Tracking