TASKENT, 24 (DPA/EP)

El presidente de Uzbekistán, Shavkat Mirziyoyev, parte como favorito absoluto en las elecciones presidenciales de este domingo en el país, sin la presencia de candidatos capacitados para disputarle la reelección.

Mirziyoyev, de 64 años, recibió hace cinco años el 88,6 por ciento de los votos y se espera que este año repita victoria por un amplio margen, mientras los observadores internacionales critican la exclusión de la oposición de la votación.

Tanto la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) como activistas por los Derechos Humanos se han quejado de la ausencia de opositores y de restricciones a los medios de comunicación. Los otro cuatro candidatos pertenecen a partidos leales al Gobierno uzbeco.

Desde 2016, después de la muerte de su predecesor Islam Karimov, Mirziyoyev ha abierto el país al mundo exterior, especialmente en materia económica. Conocido por sus ciudades como Samarcanda y Bukhara en la histórica Ruta de la Seda, Uzbekistán ha eliminado los requisitos de visado para los turistas occidentales y atrae a inversores extranjeros con exenciones fiscales temporales.

En el escenario internacional, Mirziyoyev promueve las buenas relaciones con Afganistán y ha asegurado que ayudará a su país vecino, donde la reciente toma de posesión de los talibán ha desencadenado una crisis económica y humanitaria.

"Nuestra tarea más importante es hacer de Asia Central una región en desarrollo próspera y digna", ha asegurado frente a los temores de los uzbecos sobre la situación en Afganistán, y la expansión del Islam radical o incluso el terrorismo, así como un aumento del contrabando de drogas, derivadas del retorno de los talibán al poder.

Se espera que los resultados se den a conocer a lo largo del lunes, según las estimaciones de la comisión electoral.