El aspirante a liderar IU de la corriente crítica a la actual dirección, José Antonio García Rubió, accede a ir a la reunión entre candidatos a la asamblea federal propuesta la tarde del lunes por la ministra de Juventud e Infancia, Sira Rego.

De cara a esta cita propondrá suscribir una declaración unitaria para una "profundización de la democracia real" en España y de reivindicación de la "supremacía de la soberanía popular".

A través de la red social 'X', ha indicado que comparte la idea de convocar a los cabezas de lista de las candidaturas a la coordinación de IU, dada la situación política del país una vez que el lunes el presidente, Pedro Sánchez, desvelará la decisión sobre si continúa en el cargo.

Desde su sector, denominado 'La izquierda necesaria' y que en la anterior asamblea de IU obtuvo el apoyo del 20% de la organización, han explicado que por "lealtad" a su organización y "sentido de responsabilidad política" su candidato acudirá al encuentro planteado por Rego.

Eso sí, han subrayado que lo hacen por el momento y la necesidad que atraviesa el país, pero acudirán con una "propuesta hacia la ciudadanía" y no por la cuestión interna relativa a la cita congresual de IU.

Rubió ha accedido así a la petición de Rego, que ha lanzado una convocatoria pública al resto de candidatos que quieren presentarse también en la próxima asamblea federal a una reunión este lunes por la tarde para intentar lograr un acuerdo para una lista unitaria.

Rego lo ha trasladado de esta manera a la militancia de IU en una carta pública en la que apela a los otros aspirantes a un último intento para consensuar entre los distintos sectores de IU un equipo unitario para renovar la dirección.

Hasta la fecha, aparte de Rego han mostrado su intención de relevar a Alberto Garzón al frente de IU el exlíder de la federación andaluza, Antonio Maíllo, el coordinador autonómico de Madrid, Álvaro Aguilera, y el representante del sector crítico a la actual dirección José Antonio García Rubio.

Precisamente este lunes termina el plazo para formalizar candidaturas con el requisito de obtener un 2% de avales de la militancia. Así, este movimiento intenta que el proceso congresual de IU no derive en una asamblea de confrontación entre candidaturas.