El preso de ETA Iñaki Reta de los Frutos ha admitido este lunes su implicación en el traslado de armas y explosivos de la banda terrorista desde Francia a Portugal en 2010, unos hechos por los que ha aceptado ser condenado a seis años de prisión.

La Audiencia Nacional ha comenzado esta mañana el juicio a Reta de los Frutos, que finalmente se ha saldado con un acuerdo de conformidad entre la Fiscalía y el acusado, que ha reconocido los hechos por los que se sentaba en el banquillo.

De esta forma, según han precisado a Efe fuentes jurídicas, ha aceptado ser condenado a seis años de prisión por un delito de depósito y transporte de armas, municiones y sustancias explosivas e inflamables, si bien la Fiscalía le ha retirado la acusación por el de integración en organización terrorista al haber sido ya condenado en Francia por el mismo en 2018.

Por ese mismo traslado de armas y explosivos se sentaron también en el banquillo hace dos años el exjefe de ETA Mikel Kabikoitz Carrera Sarobe, ATA, y Jon Etxeberria Oiarbide, que resultaron condenados, respectivamente, a diez y nueve años de cárcel.

Reta, que estuvo considerado miembro del aparato logístico de la banda y fue condenado varias veces en España, fue detenido en 2015 en Francia, sentenciado en 2018 a ocho años de cárcel y en 2019 el Tribunal de Apelación de París aceptó entregarle a España para ser juzgado por el citado traslado de armas y explosivos desde Francia a Portugal en una furgoneta que fue interceptada en Zamora.

Según la Fiscalía, en el vehículo -en el que se encontraron las huellas de Reta en una cinta de embalar- se halló material suficiente para haber confeccionado más de doscientos dispositivos de artefactos explosivos para la comisión de atentados.

Considera que Reta y Jon Etxeberria, coordinados por Mikel Kabikoitz Carrera Sarobe, participaron en el depósito y transporte del material intervenido.

En su escrito de acusación la Fiscalía relata que Mikel Kabikoitz, utilizando una identidad falsa, alquiló en 2010 una furgoneta y un coche para trasladar material desde Francia a la base de apoyo logístico de ETA en Óbidos (Portugal), utilizada para desarrollar las actividades criminales de la banda con vistas a la ejecución de atentados terroristas en España.

Garikoitz García Arrieta e Iratxe Yáñez Ortiz de Barron -ya condenados por estos hechos- iniciaron el viaje el 9 de enero de 2010 conduciendo desde el sur de Francia hacia España, con destino a Portugal, y a su llegada a Bermillo de Sayago (Zamora), fueron interceptados por la Guardia Civil.

Los agentes descubrieron en la furgoneta varias bombonas de gran tamaño, un bidón metálico y placas de matrículas. En un momento dado García Arrieta empujó con violencia a uno de ellos hacia el interior del vehículo y se apoderó del coche patrulla, con el que se dio a la fuga, si bien acabó siendo detenido en la localidad portuguesa de Moncorvo. Iratxe Yáñez de Barron fue detenida una hora más tarde.