La Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Sevilla juzgará la próxima semana a cuatro georgianos para quienes la Fiscalía pide diez años de cárcel, siete de ellos por robo con fuerza en casa habitada y tres por pertenencia a organización criminal que actuaba en varios países de Europa.

Según el escrito del Ministerio Público, al que ha tenido acceso Efe, los acusados son G.S., D.J., T.K. y M.G., todos en situación irregular en España, y formaban una organización especializada en "violentar domicilios dejando pocas marcas o síntomas de forzamiento visible".

El grupo actuaba de manera itinerante por varios países europeos, hasta el punto de que dos de sus componentes tenían antecedentes en Suecia y Austria, y fue atrapado en Sevilla en agosto de 2018.

Los cuatro presuntos ladrones "siempre" robaban joyas y dinero en efectivo y estudiaban "profundamente" los bloques y la rutina de sus moradores antes de realizar los robos, de modo que colocaban "trozos de plástico" en las puertas y si el marcador continuaba en el mismo sitio al día siguiente, sabían que en la vivienda no había nadie.

Además, "adoptaban medidas de seguridad y contravigilancia y nunca actuaban todos a la vez, sino que iban por parejas y nunca repetían los mismo integrantes", añade la Fiscalía.

De esta manera empezaron a actuar en Sevilla, a donde llegaron en el verano de 2018 para instalarse en un apartamento turístico que alquilaron en el barrio de Triana.

Entre el 2 de julio y el 4 de agosto de 2018, los cuatro integrantes de la banda cometieron diez robos en otros tantos inmuebles de la capital en los que se apropiaron de dinero, joyas y otros objetos por un importe próximo a los 100.000 euros.

El 5 de agosto de ese mismo año, el Grupo de Atracos de la Policía Nacional registró el piso que habían alquilado y encontraron joyas, ganzúas, tensores, metal moldeable, varios flejes y una navaja profesional, entre otras cosas.