"Presidente Torra, respete a los Mossos". La respuesta de los mossos, que en principio va dirigida al Fiscal Superior de Cataluña, Francisco Bañeres, se refiere también al Presidente de la Generalitat.  

Bañeres abre una investigación para confirmar si hubo "ausencia de conminación" de los policías el pasado puente de la Constitución (cuando los CDR cortaron la AP-7), y la Unión Sindical de la Policía Autonómica de Cataluña (USPAC) responde acusando a la Generalitat de lo sucedido: "Los agentes de los Mossos son excelentes profesionales que no tienen la culpa que desde el gobierno de la Generalitat se aliente a determinados grupos de personas a 'apretar' contra los intereses de los ciudadanos e incluso contra la integridad física".

El sindicato resalta que las diligencias abiertas por la Fiscalía "criminalizan" la actuación de los agentes, dado que por parte de sus superiores se les está requiriendo que entreguen minutas policiales referentes a sus actuaciones para ser aportadas al ministerio público.

Y remarcan: "No es la primera vez que los agentes 'de calle' se ven envueltos en este tipo de diligencias que luego pueden finalizar en un procedimiento penal como investigados, tal y como ocurrió con los hechos acaecidos el 1-O en Cataluña".

Para la USPAC, los mandos de los Mossos "van a seguir sin asumir ninguna responsabilidad, sin defender las actuaciones de los agentes que siguen sus órdenes, y limitándose a derivar la responsabilidad de la actuación individual de cada uno de ellos"

Los mosos "somos el último eslabón de una cadena, los más vulnerables". "Presidente Torra, respete a los Mossos"