La Fiscalía apoya entregar a India a un reclamado por conspirar para matar al jefe de la comunidad religiosa Namdari y a un suboficial de Mata Chand Kaur, con la explosión de una bomba en el festival de música sagrada Hari Vallabh Sammelan, en la ciudad de Jalandhar en 2015, siempre y cuando haya un compromiso de no aplicarle la pena de muerte ni la cadena perpetua de por vida.

La sección primera de lo Penal de la Audiencia Nacional celebra el próximo martes la vista de extradición de este reclamado, Mehenga Singh, que se encuentra en libertad provisional -con la prohibición de abandonar España y la obligación de comparecer periódicamente en el Juzgado- tras ser arrestado el 14 de enero de 2022 en virtud de orden internacional de detención emitida por autoridades judiciales de India.

Según la petición de extradición, recogida en el informe del fiscal, "un grupo formado por el reclamado y otras personas pretendía matar a Satguru Uday Singh, actual jefe de la comunidad religiosa Namdari y a Sant Jagtar Singh, suboficial de Mata Chand Kaur" haciendo explotar una bomba durante el citado festival de música sagrada, que se celebraría el 25 de diciembre de 2015.

Singh y otros investigados, según indican las autoridades indias, proporcionaron material explosivo para la fabricación de tres bombas tiffin a otros miembros del grupo con el objeto de perpetrar el citado atentado.

Una de las bombas explotó cuando estaba siendo manipulada por uno de los miembros del grupo, el 4 de diciembre de 2015, causando la muerte de uno de ellos y heridas a otro.

Por estos hechos se le acusa de delitos análogos en el Código Penal español a los de pertenencia a organización criminal, conspiración para el asesinato, tenencia o depósito de sustancias o aparatos explosivos y homicidio imprudente.

La Fiscalía considera que se dan los requisitos para acceder a la entrega, si bien apunta que, dado que la solicitud de extradición se basa "en hechos constitutivos de conspiración para cometer delito de asesinato, castigado por el Código Penal de la República de India con la pena de muerte o pena de reclusión perpetua, si se concede la extradición deberá condicionarse (...) a que por parte de la República India, a través de su Embajada, se preste la garantía previa, de que la pena de muerte no será aplicada".

Y también, añade, "de que la cadena perpetua prevista en calidad de castigo alternativo no está predeterminada de antemano ni significa la pena privativa de libertad incondicional e invariable de por vida".