¿Por qué España ha decidido plantarse ante el acuerdo sobre el Brexit que han alcanzado la UE y Reino Unido? El presidente Sánchez ha avisado de que España vetará la aprobación del documento si no se modifica el punto que afecta al control sobre el futuro de Gibraltar. El líder socialista había mostrado su alegría por este acuerdo hace dos semanas. Sin embargo, la introducción de una cláusula - "con nocturnidad y alevosía", según el Gobierno - desbarata la satisfacción del gobierno español.

¿Qué ha cambiado en el acuerdo para que España ahora se muestre en contra del documento? Todo se debe al artículo 184 "colocada por sorpresa por la UE a instancias de los británicos". Dicho artículo dice lo siguiente: 

"Negociaciones sobre la relación futura. La Unión (Europea) y el Reino Unido realizarán sus mejores esfuerzos, de buena fe y con pleno respeto de sus respectivos ordenamientos jurídicos, para tomar las medidas necesarias para negociar los acuerdos que rigen su futura relación mencionada en la declaración política de [DD / MM / 2018] y para llevar a cabo los procedimientos pertinentes para la ratificación o celebración de dichos acuerdos, con miras a garantizar que dichos acuerdos se apliquen, en la medida de lo posible, a partir del final de la transición".

El artículo, enrevesado y aparentemente genérico, pero es una manera de excluir a España de cualquier futuro acuerdo entre la UE y Reino Unido sobre Gibraltar. Al vincular esa "futura relación" con la "declaración política" que es el pacto de divorcio (que incluye el protocolo sobre Gibraltar), a una negociación entre la UE y el Gobierno británico, los abogados españoles creen que se da a entender que el estatus del Peñón será negociado como parte integral de Reino Unido. En el pacto de separación firmado anteriormente, se establecía que los gobiernos español y británico serían los que negociarían de manera bilateral todos los aspectos relacionados con Gibraltar.

 Para España, resulta fundamental que cualquier asunto sobre el Peñón sea siempre negociado entre España y el Reino Unido y cualquier acuerdo al respecto deberá contar con el visto bueno previo de España, por lo que la referencia deberá quedar explicitada "con total claridad", sobre todo tratándose de un acuerdo que regirá las relaciones a futuro.  El artículo, "desconocido por todos salvo por quien o quienes lo introdujeron casi con alevosía y nocturnidad", fue descubierto por el equipo de Exteriores la noche del pasado miércoles. Desde entonces, el Ministerio que dirige Josep Borrell ha consultado con la Asesoría Jurídica Internacional, con la Abogacía del Estado y con expertos legales y constitucionales y ha llegado a la conclusión de que el texto del acuerdo y de la declaración política especifican este punto. "Tiene que quedar meridianamente claro que cualquier relación futura entre la UE y Reino Unido debe contar con el visto bueno de España", ha subrayado en varias ocasiones Aguiriano.