La líder de Ciudadanos en Cataluña, Inés Arrimadas, ha considerado hoy que una reforma constitucional se puede plantear si se hace "con sentido de Estado", huyendo del "partidismo y el cortoplacismo" y si todas las formaciones dejan "su carné en casa".

En un acto celebrado en el Conservatorio del Liceo barcelonés, titulado "40 años de constitucionalismo" y en el que ha participado junto al presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, y el candidato a la alcaldía de Barcelona y ex primer ministro francés, Manuel Valls, Arrimadas ha partido sin embargo de "una premisa básica: el problema de España no es la Constitución".

Aun así, en caso de que se quisiera reformar la carta magna, esta reforma debería liderarla "quien cree en este país y quiere que vaya a mejor".

"Si la debe decidir Junqueras, mal vamos", ha ironizado, pues ha señalado que las demandas de los soberanistas catalanes en este hipotético caso "solo serían un paso previo para delimitar más al Estado".

Solo a alguien a quien "le importe el país" y entienda que "el consenso" sería el pilar básico de una reforma podrá dedicarse a esta tarea, ha apuntado.

Así, ha dicho que "cuando la gente ataca la Constitución ataca la protección de derechos y libertades", ya que es la carta magna la que "defiende en este país el derecho de ciudadanía".

Ha contrapuesto así los valores constitucionales a "quienes quieren construir una Cataluña basada en la identidad".

"Lo que garantiza la Constitución es que cada uno pueda ser catalán como le de la gana, mientras sucumbir al nacionalismo es tener que encajarse obligatoriamente en la identidad que define a los nacionalistas y excluye a quien no cumple todos los requisitos", ha agregado.