El temporal de frío y nieve que ha puesto este viernes en alerta a 13 comunidades, dos de ellas en nivel rojo, y ha provocado incidencias en un centenar de carreteras de media España se mantendrá todo el fin de semana, y un nuevo frente afectará a más comunidades con nuevas nevadas e intensos vientos.

Este viernes, casi 1.200 kilómetros de carreteras registran alguna incidencia por la nieve, aunque ninguna vía de la red principal se ve afectada a estas horas por cortes de tráfico y sólo una en Asturias (N-639), otra en Cantabria (N-621) y tres en Castilla y León (N-629, N-625 y N-630) precisan uso de cadenas.

Sin embargo, permanecen cerrados más de 300 kilómetros de la red secundaria de Asturias, Cantabria, Castilla y León, Baleares, Comunidad Valenciana y Andalucía, la mayoría puertos de montaña, y Renfe se ha visto obligada a modificar los trayectos de algunos de sus trenes Alvia e Intercity.

Por otro lado, una fuerte granizada ha provocado tres accidentes de tráfico sin heridos, que han causado importantes retenciones de hasta 12 kilómetros en la AP-8, a la altura de Usurbil (Guipúzcoa), aunque la situación quedaba normalizada al mediodía.

Además, la permanencia del anticiclón al norte de Azores y de bajas presiones en el Mediterráneo asegurará la continuidad del flujo del norte sobre la Península y Baleares, con nuevos frentes que entrarán por el Cantábrico el lunes y el martes.

Las zonas más probables de nevadas serán el interior norte peninsular y el entorno del sistema Ibérico, y durante esos días la importante acumulación de nieve en la Cordillera Cantábrica aumentará el riesgo de aludes, informa la Aemet.

La nieve impide ir a clase a más de 5.300 escolares en Castilla y León

Un total de 5.361 escolares de centros públicos y privados de Castilla y León no han podido acudir hoy a clase debido a la nieve caída en algunas provincias de la comunidad que ha dejado las carreteras intransitables, ha informado la Consejería de Educación.

Según datos de las 14:00 horas, la mayoría de los escolares ausentes se concentra en la provincia de León, donde no han podido acudir a las aulas 3.239 alumnos.

La segunda provincia de Castilla y León con mayor número de alumnos afectados por las inclemencias meteorológica es Burgos, donde no han podido ir al colegio 1.494 alumnos.