Desde niño tuvo claro que quería ser cocinero, así que a los 14 ya estaba trasteando con cacerolas en la Escuela de Hostelería de Leioa. En el año 2000 su sueño estuvo a punto de quedar truncado. Un accidente de moto le dejó en coma 21 días. Estuvo al borde de la muerte y perdió dos sentidos imprescindibles para su profesión, el gusto y el olfato. Supo hacer de tripas corazón y se presentó al Concurso de Mejor Chef Joven. Lo ganó y hoy cuenta con una estrella Michelín y 3 soles Repsol.

Al frente de los fogones de “Nerua” tenemos a Josean Alija. Su cocina va directa al meollo de la cuestión, a la esencia, a lo que él denomina “Muina”. Un proceso para el que es fundamental la investigación. Una cocina local, que nace en la huerta, el mar y la granja, pero que tiene un lugar excepcional para ser expuesta al público: el museo Guggenheim de Bilbao.

En 2011 Nerua recibe su primera estrella en la Guía Michelin y 3 Soles en la Guía Repsol. Además, la Academia Internacional de la Gastronomía le otorga el Prix du Chef de L’Avenir 2011 (el Chef del Futuro). Josean Alija nos cuanta cómo han pasado esos 11 años desde su gravísimo accidente hasta la llegada de los reconocimientos. Reconoce que la más elemental de sus recetas requiere no menos de 7 horas para su elaboración. “Me he complicado la vida desde pequeño”, reconoce. Además, asume que ha nacido un par de veces, por lo que las cosas “requieren su tiempo”. Un placer charlar con él en “Oído Cocina”.