El año hidrológico concluye con un 14 por ciento menos de lluvia de lo normal, lo que agrava la situación de sequía en toda España, en especial en el noroeste peninsular, donde las precipitaciones siguen muy por debajo de la media.

El año hídrico (1 octubre -30 septiembre) finaliza con un estado entre "seco y muy seco" y una precipitación media de 550 litros por metro cuadrado, casi 100 litros por debajo de la media que es de 640 litros.

En el conjunto de las comunidades con más carencia de precipitaciones, destacan, por su excepcionalidad, numerosas áreas del noroeste peninsular donde las lluvias están muy por debajo de la media. Amplias zonas de Galicia, Asturias, Cantabria y Castilla y León y algunas zonas de Canarias occidental, zonas aisladas de Extremadura e interior de Andalucía, donde las lluvias se sitúan por debajo del 75 por ciento.

Francisco Turrión, hidrogeólogo de la Confederación Hidrográfica del Segura, asegura que "hay que hablar de los embalses subterráneos, porque hablamos como si debajo hubiera plásticos".

Asegura Turrión que no "hablamos de las aguas subterráneas porque no tenemos costumbre, cuando los embalses subterráneos están al 70-80%" que además afirma que "habría que utilizar de forma más sostenible los acuíferos porque hay agua de los acuíferos que van directamente al mar".

"El  Plan Hidrológico del Júcar dice que se van al mar 500 hectómetros de agua embalsada, más que el trasvase Tajo- Segura" explica el hidrogeólogo  que apuesta por este agua subterránea como solución a la sequía "estamos haciendo una evalución de la sequía en función de unos embalses superficiales cuya agua se evapora al sol un 20% y no tenemos contabilizado como recurso, este agua subterránea de los acuíferos por el Estado".