La presidenta y portavoz de Foro en la Junta General, Cristina Coto, ha acusado hoy al secretario general de su partido, Francisco Álvarez-Cascos, de estar detrás de una operación política que ha provocado una crisis política en su seno.

Coto se refería así a la fractura abierta entre los tres diputados que integran el Grupo de Foro en la Junta General a raíz de que ella decidiera cambiar la retribución de una de las dos asesoras del grupo para que cobrase la jornada completa que realizaba, aunque sólo cobraba media.

La decisión, según los diputados Pedro Leal y Carmen Fernández, fue adoptada sin que fuesen consultados y a pesar de que, en ocasiones anteriores, se habían manifestado en contra.

En un comunicado al que ha dado lectura en los pasillos del parlamento asturiano, Coto ha trasladado su respeto profesional por Pedro Leal y Carmen Fernández, "que son trabajadores esforzados y buenas personas", si bien ha lamentado la instrumentalización que, en su opinión, "de ellos se está haciendo".

Según Coto, lo único que ha hecho ha sido cambiar de jornada a una de las dos asesoras del grupo, porque las dos hacen lo mismo pero una solo cobraba media jornada "y a igual trabajo hay que pagar igual salario".

"Sería de una extraordinaria hipocresía acudir a la equiparación salarial y no aplicarlo en mi casa", ha señalado la presidenta de Foro, que considera que la crisis que se ha abierto con esta decisión no es por una cuestión personal sino política.

De hecho, ha insistido en que "nunca, nunca" ha tenido que consensuar nombramientos ni ceses ni dedicaciones "con nadie más que con el secretario general".

Sin mencionar el nombre de Cascos en ningún caso, sólo por su cargo, Coto ha señalado que ese tipo de decisiones "nunca han pasado por órgano alguno, ni del partido ni del grupo y sólo se deciden entre el secretario general y la presidenta".

"La única diferencia ahora es que mi secretario general discrepa de la decisión que he tomado, pero como creo que es una decisión de justicia la he tomado", ha afirmado Coto antes de reconocer que es consciente del coste que tiene en su entorno.

Asimismo, ha mostrado su extrañeza que este asunto se haya querido vincular con el hecho de que la alcaldesa de Gijón, Carmen Moriyón, haya sido animada a presidir el partido y liderar la lista electoral tras el congreso del próximo mes de septiembre.

Según Coto, ambas cuestiones no tienen "absolutamente nada que ver" y más cuando ella misma ha animado a Moriyón a dar el paso de residir el partido.

"Si finalmente toma el mando de esta formación, espero que tenga siquiera un gramo mas de autonomía del que tengo yo. El tiempo me ha demostrado que algunos necesitan un enemigo a batir en la propia casa", ha señalado en referencia a Álvarez-Cascos.

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Por último, y tras pedir "disculpas a los afiliados por la imagen" que están ofreciendo, ha asegurado que "algunos tienen la capacidad de transformar un grano de arena en una crisis política".