La pandemia y el confinamiento obligó a muchas cancelaciones médicas, tanto por parte de los pacientes como de los médicos, lo que ha derivado en una solución muy en la línea de esta nueva normalidad que vivimos: la teleasistencia.

La teleasistencia cubre desde llamadas telefónicas a videollamadas, y aunque, a día de hoy es posible que muchos españoles, sobre todo los mayores, se muestren reticentes a este tipo de atención médica, los sanitarios aseguran que es una consulta igual de válida que la presencial.

Eso sí, hay que tener en cuenta que hay algunas cuestiones que no pueden cubrirse con una consulta online. ¿Para qué sí debemos recurrir a estas consultas en los tiempos que corren? Por ejemplo, para primeras consultas de diagnóstico o bien para cuando se trate de una revisión.

Hay algunas pautas que debemos tener en cuenta para que nuestra consulta online resulte fructífera: debemos ser concisos con lo que nos ocurre, tener a mano información médica que pueda guiar a los médicos que nos atienden y, sobre todo, no interrumpirles.

Aunque es verdad que aún queda mucho por desarrollar en este ámbito debemos concienciarnos que la teleasistencia ha llegado para quedarse.