Santoral

San Lesmes

Su entrega al servicio de los pobres y enfermos le mereció el ser considerado santo. Es patrón de la ciudad de Burgos.

Dice Cristo en el Evangelio que siempre oyes el Solplo del Espíritu Santo y su ruido de dulzura, pero no sabes ni de dónde viene ni adónde va. Así alude a la fuerza de Dios que lleva a cada uno a distintos lugares, incluso, para llevar a cabo el Plan Salvífico de la Divina Providencia. Esto le sucede al Santo de hoy, San Lesmes, en el IV Domingo del Tiempo Ordinario. Un francés nacido en Loudin en el inicio del siglo XI y que procede de familia noble.Sus padres y allegados poseen muchas riquezas en cuanto a territorios.

Pero Lesmes ha profundizado en el Pasaje de la Carta del Apóstol Santiago que dice que “quien quiere ser amigos de las cosas del mundo, termina por ser enemigos de la cosas de Dios”. Esto le ayuda a descubrir su vocación a la vida contemplativa y a desprenderse de los bienes familiares, rematando lo que recuerda la Sagrada Escritura: “Si quieres ser perfecto vende cuanto tienes y dáselo a los pobres porque así tendrás un tesoro en el Cielo. Luego sígueme”.

Cuando quiere dilucidar bien su carisma peregrina a Roma y en el camino encuentra a San Roberto en el Monasterio Chaise de Die. Le parece que va a ser su lugar, pero quiere asumir el compromiso de ir a la Ciudad Eterna como había y una vez allí descubrir si ese es su sitio de verdad y encomendarse a San Pedro y San Pablo, Columnas de la Iglesia. Es la manera de descubrir lo que el Señor le pide

A su vuelta ingresa en el lugar señalado donde será maestro de novicios con grandes frutos. Constanza de Borgoña, esposa de Alfonso VI, enterada de su labor espiritual y humana le pide que vaya a Burgos. Lesmes acepta y funda en la capital burgalesa un nuevo Monasterio -el de San Juan Evangelista- del que será Abad hasta su muerte ocurrida en el año 1097. Hoy también es la Jornada Mundial contra la lepra.


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