Los sabios y los pequeños
Un domingo más proponemos un examen de conciencia que nbis ayude a reflexionar sobre nuestra propia oración
Tiempo de lectura: 1’
“Te doy gracias Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque has escondido estas cosas a los sabios y entendidos y se las has revelado a los pequeños”. (Mt 11,25)
- Son muchos los que dicen que les resulta difícil orar. ¿No podríamos aprender de esta sencilla oración de Jesús?
- Con mucha frecuencia podemos observar que en nuestras oraciones nos limitamos a pedir favores y ayudas a Dios. ¿Por qué son tan poco frecuentes las oraciones de acción de gracias?
- ¿Cuáles son las cosas que permanecen escondidas para los poderosos y los afortunados, para los sabios y entendidos de este mundo?
- En nuestra sociedad son valorados los que brillan por sus conocimientos, sus riquezas o su habilidad. ¿Por qué piensa Jesús que Dios ha revelado sus misterios a los pequeños?
- ¿Seríamos capaces de adivinar cuáles son esos misterios que el Padre celestial ha revelado a las gentes más sencillas de este mundo?
- ¿Podríamos dedicar un tiempo a recordar las lecciones y los testimonios que hemos recibido de las personas más sencillas y con frecuencia marginadas?
- ¿Y yo estoy dispuesto a escuchar y poner en práctica las enseñanzas que todos los días recibo de los pobres y de las personas más humildes de nuestra sociedad?