Robo de hostias consagradas y daños de varios objetos: así quedó una parroquia de Brasil tras ser asaltada
Los hechos tuvieron lugar el pasado 9 de agosto en la parroquia Nuestro Señor de Bonfim en el municipio de Maceidó. La policía está investigando para detener a los autores
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Consternación e indignación en la comunidad cristiana de Brasil, después de que un grupo de asaltantes profanaran la Eucaristía y robaran las hostias consagradas en la parroquia de Nuestro Señor de Bonfim en el municipio de Maceidó.
Los hechosm tal y como confirma el párroco del templo, el Padre José Kermes Martins, tuvieron lugar el pasado 9 de agosto. El sacerdote precisó que los atacantes dañaron varios objetos religiosos y parte de sus instalaciones.
En el comunicado, el Padre Kermes Martins aseguró que no solo se trató de un acto de vandalismo, sino de un “sacrilegio”, pues los “vándalos” profanaron el Sagrario y se robaron el copón con las hostias consagradas. Además, lamentó que “estos allanamientos, con pequeños hurtos, se están dando con mucha frecuencia en nuestras iglesias”.
En un video difundido en redes sociales, una de las feligresas mostró las instalaciones de la parroquia de Nuestro Señor de Bonfim después del ataque, en el que se puede contemplar cómo las hostias aparecen esparcidas en el suelo, junto a copones, patenas y otros objetos sagrados tirados. Además, se ve una habitación con la puerta y pared destrozadas, un clóset abierto con casullas tiradas en el piso, y otros armarios con objetos de valor que habrían sido saqueados.
Oremos pelo sacrilégio e vandalismo ocorrido em Alagoas/Maceió na Igreja Nosso Senhor do Bonfim,Bairro do Poço
— Paula Zanelli (@paulazanelli) August 12, 2022
A igreja foi alvo de vandalismo na madrugada em 09/08 terça-feira
Foram furtados hóstias e vinho. Nessa semana 2 ataques à igreja,o outro foi em Guarulhos pic.twitter.com/I6sp9OMvbB
"Se comieron las hostias y bebieron el vino de Misa"
Estos ataques vandálicos están investigándose a día de hoy. Se sospecha que habría más de un delincuente implicado. El oficial precisó que los criminales “se comieron las hostias y bebieron el vino de la Misa. Pero solo se llevaron dos ventiladores, lo que es raro porque el lugar tenía objetos de valor como equipos de sonidos, pero no se los llevaron. Incluso defecaron a la salida de la iglesia”.
Además, dijo que los delincuentes conocían las instalaciones, porque ingresaron y salieron de la iglesia por la única ventana sin rejas del edificio. “Ya tenemos información consistente, pero aún está bajo investigación”, sostuvo.
Para manifestar el dolor por los hechos, la parroquia de Nuestro Señor de Bonfim acogió una Misa el pasado 11 de agosto, oficiada por el arzobispo de Maceió, Antonio Muniz, y concelebrada con varios sacerdotes y diáconos. Tras la Eucaristía, los fieles presentes adoraron el Santísimo Sacramento toda la noche
