Salvador Aguado, el párroco de Alfafar que salvó el Sagrario de la dana: "Hasta hace un mes no hemos cobrado el seguro del Consorcio para ponernos con la reconstrucción"
Un año después de que el agua arrasara con el mobiliario de la parroquia de Santa Fe, el sacerdote detalla que los daños del templo no se han subsanado y cómo es el día a día de los feligreses: "Está siendo duro a nivel psicológico"

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“Estamos vivos”: dos palabras que resume de manera precisa el estado anímico en el que se encuentran quienes hacen un año lo perdieron (casi) todo en la dana que dejó más de 200 muertos en la provincia de Valencia y miles de proyectos truncados.
“Estamos vivos”, ha comenzado su entrevista en COPE Salvador Aguado, párroco de Santa Fe en Alfafar, uno de los municipios más afectados por la catástrofe natural. Desde aquel 29 de octubre nada volvió a ser como antes en la parroquia. “Está siendo duro, no solo a niveles de infraestructura, sino a nivel psicológico”.
La tarde transcurría con normalidad aquella tarde del 29 de octubre de 2024. En Alfafar no llovía al filo de las siete de la tarde, cuando se celebró como cada día misa. Casi 25 fieles acompañaron a Salvador en la Eucaristía. Pero en el momento de comulgar el alboroto exterior llamaba la atención de los feligreses. Los coches eran desplazados por el viento, inmisericorde al paso de los viandantes.
"Hace unos días saltaba la alerta roja y cundió el pánico, el miedo está en el ambiente"
Al recordar aquellas escenas, no es de extrañar que la psicosis se haya apoderado de los vecinos un año después: “Hace unos días saltaba la alerta roja y el peligro de lluvia, decían que intentáramos no salir ni movernos y cundió el pánico aquí, el miedo está en el ambiente, pero un año después intentando recomponernos”, ha relatado Salvador Aguado.
Concluida la misa los hechos se precipitaron en la parroquia de Alfafar aquella fatídica tarde del 29 de octubre. Salvador se desvistió de los ornamentos litúrgicos al tiempo que el agua inundaba el templo. Junto a los feligreses y los vecinos que buscaban resguardo en la parroquia se elevaron al tejado de la iglesia donde asistieron a un espectáculo dantesco. “Hubo dos coches que se estamparon contra la puerta, la reventaron y empezaron a salir de la parroquia los bancos, los muebles...”, recuerda.
Un año después, los daños en la parroquia santa fe de alfafar siguen sin subsanarse: "Hace un mes cobramos el seguro del consorcio"
Destrozos que un año después aún no han sido subsanados en su mayoría: “Queda mucho por hacer. El Ayuntamiento de Alfafar no da abasto para recomponer las farolas, los árboles, el mobiliario urbano... Y en la parroquia estamos intentando volver a la normalidad. Hasta hace un mes no hemos podido ponernos con la reconstrucción porque no habíamos cobrado del seguro del Consorcio, y ahora es cuando nos estamos preocupando por arreglar lo que queda”, ha precisado el párroco de Santa Fe.

La tarea no es pequeña, ya que es necesario derribar un muro afectado o cambiar el sistema eléctrico. En este contexto complicado, la parroquia se apaña como puede para celebrar misa o dar catequesis: “Hemos hecho apaños para ir tirando. Es difícil encontrar empresas que te hagan las obras, te dan largas hasta dos años para venir a verlo y presupuestarlo”, ha especificado Salvador Aguado.

El Padre salvador logró salvar el sagrario para su restauración: "En Valencia no hay sagrarios de madera”
Pero la verdadera obsesión de Salvador Aguado era recuperar el Sagrario de madera que, por suerte, no pudo llevarse el agua. Un día después accedió a la parroquia. El agua había arrasado todo, excepto al Cristo de los Desamparados y el altar mayor.
El Sagrario fue hallado en la puerta de la capilla, aunque encontrar la llave bajo el agua era misión imposible, por lo que el párroco forzó la puerta. El copón y las formas estaban diluidas.
Un año después, el Sagrario no se encuentra en la iglesia de Alfafar, sino en Sevilla, en manos de José Manuel Cosano, especialista de Conservación y Restauración de Obras de Arte para devolver al sanctasanctórum a su aspecto anterior a la dana. “Le tengo mucho cariño al Sagrario, porque no conozco en la diócesis de Valencia sagrarios de madera”, ha remarcado Salvador Aguado.
El intermediario entre la empresa hispalense y el sacerdote fue Gloria Quintanilla, empleada de la empresa de restauración que conoció a Salvador en el Camino de Santiago: “Vi por la televisión lo que ocurrió en la iglesia y comenté que conocía a Salvador. Yo creo que el Apóstol puso algo de su parte”, recuerda Gloria con una sonrisa. Bendita providencia.
El estado en el que llegó el sagrario a Sevilla y en qué consiste los trabajos de restauración: "Era estremecedor"
José Manuel Cosano ha detallado que, efectivamente, el Sagrario de Alfafar es muy singular, ya que a partir del siglo XIX los sagrarios de madera “se fueron sustituyendo por otros de metal y o de plata, y es menos frecuente la madera tallada y dorada en oro fino como el de la parroquia de Alfafar”, ha comentado.

El restaurador, ha detallado también en COPE el aspecto en el que llegó el Sagrario hace unos meses para proceder a su restauración: “Cuando abrimos la caja era estremecedor por los trozos de barro y el estado en el que se encontraba”, recuerda.
“Al ser un Sagrario de madera dorado, se aplica una preparación, unos estucos que están hechos de forma tradicional, al igual que se hacía en siglos pasados. Esos estucos están hechos de sulfato de cal mezclados con agua, tanto los propios estucos como el dorador”, ha continuado explicando.
De ahí que al inundarse el Sagrario, tanto el dorado como los estucos “estaban disgregados, blandos y en mal estado. El interior del Sagrario se ha conservado mejor, y aunque tiene mucho barro hemos podido salvar gran parte del dorado original”, ha celebrado José Manuel Cosano.

En cuanto a la fachada del Sagrario, la más dañada fue “la parte tallada en madera con formas ornamentales y vegetales con una puerta que tiene en el centro un cáliz con una Sagrada Forma”. Para enmendarlo, “estamos en proceso de estucado para aplicar el oro tal y como estaba realizado en su forma original”, ha agregado.
Se espera que el Sagrario regresa a Alfafar entre finales y comienzos de año: “Como mínimo habrá que invitarles a comer, están haciendo un trabajazo”, ha reconocido Salvador Aguado para ensalzar la labor de la empresa.





