Las familias con hijos menores, los más vulnerables: "Somos un país que sigue sin apoyar la crianza"

Cáritas Española ha alertado de que la Encuesta de Condiciones de Vida 2023 revela que cada vez son más las familias que tienen dificultades para llegar a final de mes, y que la entidad de la Iglesia atribuye al encarecimiento de los alimentos y de la vivienda.

El coordinador del equipo de estudios de Cáritas, Raúl Flores, asegura en 'ECCLESIA al día'que se trata de una situación que se ha convertido en estructural en nuestro país, y que se ha visto agudizada por la subida de los precios: “Esto nos sitúa en que muchas familias, cuando llega el día 4 de cada mes se quedan con el monedero vacío. Pagan su alquiler, sus suministros y les queda muy poco dinero para afrontar los gasots de alimentación”, ha advertido.

Una realidad, apunta Flores, que afecta especialmente a familias con hijos menores a su cargo y cuyos ingresos mensuales no superan los 1.200 euros y que, insiste Cáritas, suponen un elevado porcentaje: “Esto hay que mirarlo con lupa porque deja en evidencia que somos un país que sigue sin apoyar la crianza, sin apoyar a la familia y que no genera las politicas sociales de apoyar a familias y niños”.

Las medidas anticrisis de las administraciones, insuficientes

En este sentido, Raúl Flores ha apuntado que las medidas adoptadas hasta ahora por las administraciones públicas, como la subida del Salario Mínimo Interprofesional o el aumento de los salarios, está siendo insuficiente y desiguales, porque no se tienen en cuenta los gastos.

“Los sueldos se han aumentado en las capas salariales altas y poco en las bajas. Pero además de los ingresos hay que mirar los gastos, y la vivienda se ha convertido en un pozo sin fondo en el que muchas familias siguen volcando sus gastos. Y los alimentos el precio están en niveles muy altos. El balance de ingresos y gastos vemos que cada vez más familias no llegan a final de mes”, ha denunciado el coordinador del equipo de estudios de Cáritas.

Ante la escasez de recursos, explica Raúl Flores, las familias están adoptando estrategias de afrontamiento de esa insuficiencia de dinero y, el primer damnificado del ajuste presupuestario es la alimentación, ya que ofrece un mayor margen para ahorrar: “Compran productos más baratos, o no comen carne o pescado, pero en los suministros no hay margen porque los alquileres son los que son, y la luz, el agua o el gas cuesta lo que cuesta”.

La red de Cáritas para atender a las familias vulnerables

Ante esta complicada situación Cáritas ofrece una gran red de espacios a través de más de 5.000 parroquias: “Además de la alimentación, hacemos mucho más. Lo primero que hacemos es escuchar, tratar de transmitir esperanza y generar un epacio de calor humano a personas que acuden desesperadas. Lo segundo, Cáritas trabaja en cuestiones de vivienda y nos vemos obligados a pagar pagos de suministros y alquileres. Cáritas también genera procesos promocionales, busca formas de integrar a la población no solo laboralmente,sino también socialmente”, ha detallado Raúl Flores en 'ECCLESIA al día'.