Indignación en Badajoz después de que hayan robado la corona de una Virgen muy querida en la provincia

Los vecinos de La Haba han amanecido con la noticia del robo de la corona de la Virgen de su patrona, Nuestra Señora de la Antigua. Los hechos ya han sido denunciados

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Consternación entre los vecinos de la localidad pacense de La Haba, después de que la corona de la Virgen de Nuestra Señora de la Antigua, patrona del municipio, haya sido robada. Un hecho que ha sido denunciado ante la Guardia Civil.

Según el párroco, José Romero, el autor o los autores del robo forzaron la puerta de la ermita, que se encuentra a ocho kilómetros del pueblo, rompieron el cristal que protege a la imagen y se llevaron la corona. Romero apunta que no han tocado nada más de la ermita: ni el Sagrario ni el dinero de las velas. "Una persona ha saltado una pared, ha forzado una puerta y ha roto un cristal con un adoquín", ha explicado el párroco, José Romero, a COPE. "Es una patrona muy querida por todo el pueblo y su corona tiene mucho valor sentimental".



La corona sustraída, que data de principios del siglo pasado, no tiene mucho valor económico, pero sí sentimental para los vecinos de La Haba, por lo que el párroco pide que la devuelvan. Mientras tanto la Virgen de la Antigua luce otra corona, tal y como precisa el arzobispado de Mérida-Badajoz.

La ermita de Nuestra Señora de la Antigua

La ermita de Nuestra Señora de la Antigua se estima que data del año 1400. Cuenta con un elemento poco habitual en este tipo de construcciones, una torre de 25 escalones separada del cuerpo principal, edificada en mampostería de barro, piedra y sillares. Se divide en dos cuerpos por medio de una sencilla imposta, como remate superior el campanario, techado con cubierta de madera a cuatro vertientes. Esta torre se une al cuerpo principal por los soportales citados anteriormente, los cuales están compuestos por una sucesión de arcos de medio punto.

El suelo de la ermita y el porche que la rodea es de granito. En su interior cabe destacar una reliquia romana que encontramos situada tras la puerta situada en la cara norte del templo, es una pila del agua de purificarse, hecha vaciando un pedestal romano de granito.

A través de la Sacristía se accede al Camarín de la Virgen, que está decorado con frescos donde se representa la leyenda de cómo se apareció la virgen en este lugar a un pastor.


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