La letra pequeña en la jubilación que tendrán los jóvenes en el futuro y que podría afectarte: a los 71 años
La precariedad laboral, el retraso en la entrada al mercado y el colapso del sistema público empujan a las nuevas generaciones hacia un futuro incierto
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Un informe de la Fundación BBVA y el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas advierte que los jóvenes actuales, si no logran carreras laborales largas y continuadas, podrían verse obligados a alargar su vida laboral hasta bien entrados los 70 para garantizarse una pensión digna.
María Blanco, colaboradora económica del programa, lo resumía así: “No es que la ley te obligue a trabajar hasta los 71. Eso no es correcto. La edad legal de jubilación en 2025 es de 66 años y 8 meses en general, o 65 si has cotizado 38 años y 3 meses”. El problema, aclara, es otro: “Si alguien solo cotiza 30 años, por empezar a trabajar tarde o tener empleos precarios, podría necesitar trabajar hasta los 71 para mantener su nivel de vida”.
La voz de los jóvenes: preocupación y desconfianza
Para comprender cómo encajan estas proyecciones en las nuevas generaciones, La Tarde invitó a tres jóvenes con trayectorias dispares, pero con una inquietud compartida. Sara Payán, 19 años, estudiante de FP de odontología, no lo dudó al calificar su preocupación con un “diez”. “Nos preocupa muchísimo”, dijo con rotundidad.
Codrin Gheorghe, de 26 años, abogado autónomo, fue algo más templado: “Un cinco. Estoy en la mutualidad de la abogacía, no en la Seguridad Social, pero aún así me va a afectar de una forma u otra”. Codrin se muestra escéptico sobre el futuro del sistema: “Yo dudo mucho que haya un sistema público de pensiones cuando me jubile. Si lo hay, será simbólico”.
Juan Marcos, ingeniero de 24 años, lo ve lejano, pero no menos inquietante: “El sistema está obsoleto. Sobre todo con la internacionalización del trabajo. ¿Qué pasa si trabajas fuera muchos años? Cuando vuelvas, ¿qué derechos tendrás?”.
Entre la precariedad y la falta de alternativas
Sara se proyecta en el futuro y ve un panorama difícil: “Si acabo odontología a los 25 y tardo en encontrar un trabajo digno, ¿cómo voy a cotizar 38 años antes de los 65?”. La posibilidad de empezar a cotizar tarde, incluso con estudios superiores, es una constante entre los jóvenes.
Juan ya asume que su primer empleo será probablemente fuera de España. “Aquí solo hay consultoría. Para ejercer de ingeniero de verdad hay que salir fuera. Pero si cotizo en otro país, cuando vuelva, ¿qué pasa con mi pensión?”.
Codrin, por su parte, decidió directamente no depender del sistema: “Yo ya invierto por mi cuenta. No por listo, sino por miedo. No quiero que mi jubilación dependa de un político de turno”.
Pensiones
¿Un sistema al borde del colapso?
Los tres coinciden en que el sistema público actual no da para más. Codrin fue tajante: “Este sistema es de reparto. Los jóvenes estamos pagando las pensiones de personas que ya están en su etapa final, pero no vamos a tener lo mismo. Es insostenible”.
Juan, en la misma línea, comparó el sistema con una apuesta de riesgo: “Invertir en la Seguridad Social es casi más arriesgado que invertir en bolsa. No podemos dejar esto a los políticos del futuro”.
Sara, con tono sombrío, concluyó: “No sabes si después de trabajar toda la vida vas a tener una pensión digna. Eso da miedo”.
Una generación que quiere decidir
Más allá de lo económico, lo que subyace es un deseo de autonomía. Juan lo expresó con claridad: “No es solo si físicamente podré trabajar hasta los 71. Es si quiero. Quiero poder decidir si jubilarme antes, tener opciones. Eso es lo atractivo para nosotros”.
María Blanco cerró el bloque con un mensaje contundente: “Estos tres jóvenes son privilegiados por su formación, pero incluso ellos están preocupados. Imaginemos lo que sienten quienes enlazan contratos intermitentes y mal pagados. Si el sistema no cambia, muchos se verán obligados a trabajar hasta los 71… y aun así, quizá no les alcance”.
Una generación formada, globalizada y, sin embargo, atrapada en un sistema que no se adapta a sus realidades. El tiempo dirá si el sistema se reforma… o si simplemente se rompe.