Javier Santacruz, economista: “El fracaso de la opa del BBVA es una buena noticia para pymes y autónomos, que ganan competencia y mejores condiciones de crédito, y evita un monopolio bancario"
El fracaso de la opa del BBVA sobre el banco Sabadell ha dejado muchas preguntas sobre qué puede significar para el futuro del sector bancario español
Madrid - Publicado el
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El reciente fracaso de la opa del BBVA sobre el Banco Sabadell ha abierto un intenso debate en el sector financiero español. Mientras algunos inversores lamentan la oportunidad perdida de consolidar un gigante bancario con más músculo internacional, otros celebran el resultado como un triunfo para la competencia y, especialmente, para las pequeñas y medianas empresas.
El economista Javier Santacruz lo tiene claro: “El resultado ha sido bueno tanto para los clientes como para las pymes y los autónomos”, afirma en una entrevista en La Mañana del Fin de Semana de COPE. Según explica, mantener varias entidades fuertes “es francamente positivo, porque garantiza un servicio más cercano y mejores condiciones de crédito”.
Pantalla informativa de la evolución del IBEX 35, este viernes tras el fracaso de la opa del BBVA sobre el Sabadell
La reacción del mercado: el BBVA sube, el Sabadell baja
Santacruz recuerda que el sector financiero español vive desde hace años un proceso de concentración, con cada vez menos actores en el mercado. “Cuantos menos bancos haya, menos competencia existe, y eso termina afectando a los que necesitan financiación, como los pequeños empresarios o los trabajadores por cuenta propia”, señala.
Tras conocerse el fracaso de la operación, el mercado reaccionó de forma desigual: las acciones del BBVA subieron con fuerza, mientras que las del Sabadell cayeron. Para Santacruz, este comportamiento responde a varios factores.
Vista de una oficina del Banco Sabadell junto a otra del BBVA en una calle de Barcelona
“Es una mezcla de todo, pero sobre todo se están revirtiendo las expectativas”, explica. “Los accionistas del BBVA estaban más castigados porque se daba por hecho que iban a asumir el coste de integrar al Sabadell. Al no tener que hacerlo, sus acciones suben. En cambio, las del Sabadell bajan porque ya habían subido demasiado con la expectativa de la compra”.
El economista subraya que este reajuste es habitual tras una opa fallida y no implica necesariamente debilidad de ninguna de las dos entidades. “Simplemente, el mercado está ajustando las previsiones a la nueva realidad”, apunta.
La operación, de haberse concretado, habría permitido al BBVA reforzar su presencia en el mercado español y proyectar ese crecimiento hacia Europa. Sin embargo, ahora el banco presidido por Carlos Torres tendrá que redefinir su estrategia.
Los accionistas del BBVA estaban más castigados porque se daba por hecho que iban a asumir el coste de integrar al Sabadell"
Economista
Qué implica el fracaso de la opa para el BBVA
“El BBVA tiene que rehacer su plan estratégico, porque parte de sus previsiones de crecimiento dependían de ser más grande no solo en España, sino también en el mercado europeo, donde su presencia es menor”, explica Santacruz.
Además, el experto señala dos retos inmediatos para la entidad: “Debe reforzar su oferta en banca de empresas y en banca patrimonial, es decir, en la gestión del ahorro a través de fondos, planes de pensiones y banca privada”. Ambos segmentos, añade, son áreas donde el Sabadell tiene una posición muy sólida.
Más allá del impacto bursátil, Santacruz considera que el verdadero valor de este desenlace está en preservar la competencia bancaria en España. “Es una buena noticia porque evita un monopolio de facto, y eso siempre es positivo para los clientes”, afirma.
En su opinión, la coexistencia de varias entidades relevantes es esencial para el equilibrio del sistema financiero. “Si BBVA hubiera absorbido al Sabadell, los márgenes de maniobra de muchas pymes y autónomos se habrían reducido drásticamente, al depender de menos bancos para obtener crédito”, sostiene.
Este escenario, explica, podría haber derivado en peores condiciones de financiación y en una pérdida de la “banca de proximidad”, algo que sigue siendo muy importante en las economías locales.
Preguntado por si la presión política ha influido en el resultado, Santacruz no duda: “Sin duda ha influido, aunque probablemente el desenlace no habría sido muy distinto”, comenta.
BBVA y Sabadell descartan una posible fusión
El economista recuerda que más del 40% del accionariado del Sabadell está en manos de sus propios clientes, lo que hacía difícil convencerles de vender. “Era complicado que aceptaran una oferta que venía de fuera, salvo que fuera muy generosa, y no lo fue”, señala.
En ese sentido, Santacruz cree que el BBVA cometió un error de cálculo: “La oferta fue demasiado ajustada y, cuando la mejoraron, solo lo hicieron en acciones y no en dinero. Fue una propuesta poco atractiva para los accionistas fieles del Sabadell”.
Con la opa descartada, el panorama bancario español se mantiene más equilibrado. “El BBVA tendrá que centrarse en crecer de forma orgánica y en mejorar su competitividad, especialmente en el ámbito europeo”, concluye Santacruz.
Mientras tanto, los pequeños empresarios, autónomos y particulares pueden respirar tranquilos. “Este resultado les favorece directamente: hay más competencia, más opciones y mejores condiciones para acceder a crédito”, sentencia el economista.