El Rey Felipe VI es el jefe de las fuerzas armadas, un cargo para el que hace ya 38 años recibió una formación militar. Cuando el Rey tenía 17 años, ingresó en la Academia General de Zaragoza, algo que ha hecho este mismo jueves su hija, la princesa Leonor, quien sigue sus pasos ingresando en la misma academia, una academia en la que se forman todos los que aspiran en algún momento a ser oficiales del ejército. La princesa ha llegado acompañada por sus padres y con ropa informal y, por supuesto, con unos nervios lógicos teniendo en cuenta la importancia de este día.

Con este ingreso arranca la formación de la princesa, quien tras superar el primer año en el ejército de tierra, deberá superar dos más en el del mar y el del aire. En total, el batallón de cadetes de la princesa tiene 612 alumnos. Al tratarse de un régimen de internado, no podrá salir de la academia de lunes a jueves, aunque tendrá los fines de semana libres, a no ser que haya programadas maniobras u otras actividades.

Por esta academia pasan todos los que van a ser oficiales, y, casualmente, el próximo domingo se cumplen 50 años del ingreso del teniente general Miguel Alcañiz, quien pasó por la misma formación que inicia hoy la princesa y que ha contado en 'La Linterna' que “en la academia se aprende una formación sólida en valores como la lealtad y la humildad, también se ofrece una formación científica y técnica que le será muy útiles y, por supuesto, se aprende un amplio conocimiento humanístico para desenvolverse también en el ámbito internacional”, aunque el teniente general ha subrayado que “sobre todo, se aprende a ser un buen líder”.

Los valores de la milicia

El teniente general ha asegurado que su paso por la academia para el “es un recuerdo imborrable”, ha explicado que “no vengo de familia militar y todo para mí era nuevo, al principio fue muy duro”. De las cosas más importantes que el teniente Alcañiz se llevó de sus años de formación es que, en palabras suyas, “creas unos lazos de amistad y compañerismo que serán para siempre”, y ha asegurado que por muy difícil que pueda ser “si uno tiene vocación aprende y trabaja, y eso facilita mucho la formación militar”.

Miguel Alcañiz también cree que es fundamental que la heredera al trono se forme en la Academia General de Zaragoza porque “la princesa será capitana general del ejército y jefa general de los ejércitos, por lo que debe conocer como funcionan esos ejércitos que va a gobernar”. Y es que, según el teniente general, esos “valores de la milicia le serán importantes para ponerlos en práctica en su vida en un futuro”.

Otra cosa fundamental para el teniente general es la importancia de que “comparta esta formación con otros cadetes, entre los que será una más, y que sea un ejemplo para ellos”, ya que, según ha explicado, “el ejemplo es una de las cualidades fundamentales del líder” y ha aprovechado para volver a destacar que “los lazos de amistad que genere nunca le fallarán en la lealtad hacia ella”.