Confirmado por el INE: esto es lo que paga realmente una empresa por un trabajador que cobra un sueldo de 2.300 euros al mes

La Linterna ha analizado este miércoles en profundidad el último informe del INE sobre los costes laborales, que reflejan un aumento del 4% en los primeros meses de 2024 respecto al año anterior, marcando ya 17 trimestres consecutivos al alza. El programa, dirigido por Ángel Expósito y con las intervenciones del analista económico Iván Alonso y la periodista Pilar García de la Granja, desgranó cómo este incremento, que acumula un 23% en los últimos siete años, está impactando especialmente a las pequeñas y medianas empresas, lastrando su competitividad y capacidad de contratación.

Según los datos del INE y Eurostat, el coste laboral medio por trabajador en España supera ya los 3.100 euros mensuales, incluyendo salarios y remuneraciones en especie. Los salarios, por su parte, crecieron un 3,8% interanual, rozando los 2.300 euros de media, la cifra más alta en un primer trimestre desde el año 2000. Sin embargo, como destacó Iván Alonso, "los costes no salariales —como las cotizaciones a la Seguridad Social— ya superan los 800 euros mensuales por empleado y explican buena parte de esta escalada".

 Diferencias por sectores y comunidades  

El análisis desvela notables disparidades. Los sectores del suministro de energía eléctrica y agua lideraron los incrementos (por encima del 7%), mientras que la Administración Pública registró la subida más moderada (0,8%), aunque con un coste por trabajador que alcanza los 3.500 euros al mes. Geográficamente, Madrid, País Vasco y Cataluña presentan los costes laborales más elevados, frente a Extremadura y Canarias, que cierran la tabla.

Expósito subrayó que, en los últimos cinco años, los costes laborales han crecido un 18% más que los salarios brutos. Alonso matizó que, descontando deducciones y subvenciones, la diferencia se amplía al 20%, con un impacto "especialmente intenso tras la pandemia". Un ejemplo ilustrativo: un trabajador con un salario medio de 26.500 euros brutos anuales genera hoy un coste laboral adicional de 9.340 euros (frente a los 30.000 euros totales de 2018), lo que supone que las empresas pagan un 20% más por el mismo empleado.

 La Seguridad Social, lastre para la competitividad  

Pilar García de la Granja fue contundente: "Es una barbaridad. Un empleado que cobra 2.300 euros le cuesta a la empresa 3.100 euros al mes". Criticó que las cotizaciones sociales —destinadas "exclusivamente a pensiones", recordó— estrangulen la capacidad de las empresas para subir salarios o contratar. "El trabajador está enfadado porque no ve mejoras; el empresario, porque no puede asumir más costes. Y la solución temporal —aumentar días de vacaciones por convenio— reduce la productividad y dispara el absentismo", alertó.

 Las PYMES, las grandes perjudicadas  

Iván Alonso profundizó en el drama de las pequeñas y medianas empresas: sus costes laborales han subido un 27% desde la pandemia, llegando al 30% en las micropymes. "Al tener menos margen para absorber estos incrementos, pierden capacidad competitiva frente a las grandes corporaciones", explicó. Medidas como la subida del SMI, las bases de cotización o el "recargo solidario" para pensiones han agravado la situación. Prueba de ello, dijo, es que la creación de empleo en este segmento es ya "muy inferior" a la de grandes empresas y al sector público, según la última EPA.

En cualquier caso, el debate en La Linterna de COPE deja claro que la espiral de costes laborales, con las cotizaciones sociales como principal factor, está generando un círculo vicioso: frena la recuperación del poder adquisitivo, limita la contratación y castiga especialmente al tejido de PYMES. Sin cambios estructurales, advirtieron los expertos, la competitividad de la economía española seguirá en entredicho.