“La aspirina de toda la vida y el ibuprofeno pueden ayudar a combatir la tuberculosis, pero se tiene que combinar con la quimioterapia habitual” asegura el doctor Pere-Joan Cardona, profesor de los Estudios de Ciencias de la Salud de la Universidad Abierta de Cataluña y Jefe de la Unidad de Tuberculosis Experimental del Instituto Germans Trias i Pujol en ‘La Noche de COPE’. La tuberculosis afecta a un tercio de la humanidad, y a pesar que desde hace 4 años existen dos medicamentos nuevos, la bedaquilina y la delamanida, el acceso a ellos es muy limitado, según los especialistas. Esta enfermedad se transmite de persona a persona, a través del aire, cuando el enfermo transmisor tose, estornuda o escupe. La posibilidad de aplacar la tuberculosis con antiinflamatorios comunes supone una puerta a la esperanza. Este especialista señala que en el mundo hay medio millón de casos que son multirresistentes, es decir, que no se podrán curar nunca. Por otro lado, las condiciones de hacinamiento en las que se vive en muchas ciudades, que cada vez tienen más población, contribuyen y favorecen el contagio de la enfermedad. En nuestro país tiene una tasa de incidencia de 9 casos por cada 100.000 habitantes, y aunque parecen pocos, figuramos entre los países europeos donde se han detectado más casos.