El Celta de Vigo ha informado, a través de un comunicado en su página web, que ningún directivo del club se sentará en el palco presidencial del estadio de Balaídos al lado del alcalde de la ciudad, Abel Caballero, mientras el regidor socialista "no cumpla su palabra y deje de atacar sin motivo a la entidad".

La entidad celeste señala, además, que solo cambiará de posición cuando entienda que el alcalde de la ciudad "respete" y "cumpla" los acuerdos alcanzados con el club.

Entre ellos, destaca la nota, "realizar una remodelación del estadio que incluya los servicios, espacios y comodidades para nuestros aficionados que requiere un estadio de primer orden en una Liga de primer nivel; otorgar la concesión de Balaídos en las condiciones pactadas y con la finalización de las obras en los plazos acordados; y respetar el crecimiento del Celta en el municipio limítrofe de Mos".

Esta medida la iniciará la directiva celeste en el partido que esta noche enfrentará al conjunto dirigido por Juan Carlos Unzué con el FC Barcelona, líder de la LaLiga Santander.