El UCAM Murcia Club Baloncesto, que tras perder por 76-79 ante el MoraBanc Andorra ya se ha despedido de poder disputar las eliminatorias por el título de la Liga Endesa, tropieza otra vez en la misma piedra y es que en sus 23 temporadas en la máxima categoría, las diez últimas consecutivas, sólo ha sido capaz de estar en esa pelea en dos ocasiones accediendo a los octavos de final en la campaña 1991/1992 con Felipe Coello como entrenador y a los cuartos de final en la 2015/2016 con Fotis Katsikaris al mando.

Sito Alonso, cuyo equipo aún aspira a conseguir plaza europea en la Liga de Campeones FIBA, sigue sin poder meter al UCAM CB entre los ocho primeros y ese propósito no cumplido supone una frustración para un club que, eso sí, ha sido capaz de lograr la permanencia sin los apuros de campañas precedentes.

Los granas son decimoterceros con un bagaje de 14 victorias y 20 derrotas y en los dos partidos que le faltan por disputar, en la pista del Monbus Obradoiro y en el Palacio de los Deportes ante el Casademont Zaragoza, tratarán de llegar a Europa.

En cuanto a la lucha de los mejores la entidad murciana sólo ha sido capaz de estar ahí en el lejano año 1992 y, luego, en 2016.

En la primera de esas ocasiones el Júver Murcia, que afrontaba su segundo año en la élite, fue el duodécimo clasificado de entre 24 equipos que competían en la Liga ACB con un bagaje de 16 victorias y 18 derrotas, lo que le dio derecho a disputar la fase por el título, a la que entonces llegaban los 16 primeros clasificados. Los granas perdieron por 2-0 ante el Elosúa León en una Liga que acabaría ganando el Joventut de Badalona por 3-2 en la final frente al Real Madrid.

Aquel equipo lo lideraban los estadounidense Ralph McPherson y Clarence Kea.

Veinticuatro años después, en el curso 2015/2016, el UCAM CB que lideraba desde el banquillo el griego Katsikaris y en la pista el base argentino Facundo Campazzo, hoy en la NBA, fue séptimo con 18 encuentros ganados y 16 perdidos, lo que le permitió medirse al Real Madrid en cuartos de final.

Ese equipo, en el que también se integraban Sadiel Rojas, Augusto Lima y Nemanja Radovic, actuales jugadores granas, más José Ángel Antelo, Carlos Cabezas, Vítor Benite, Thomas Kelati y Scott Wood, entre otros, le llegó a ganar un partido a un Madrid que acabaría proclamándose campeón al superar al Barça en la final por 3-1.