Felipe VI ha presidido este martes la entrega de despachos a 120 nuevos oficiales del Ejército del Aire que han finalizado sus estudios en la Academia General del Aire (AGA) de San Javier en un acto que ha estado marcado por la pandemia y en el que, además, se ha producido el habitual relevo del director de la institución.

Tras dos años previos condicionados por la pandemia de coronavirus y tres accidentes aéreos en los que fallecieron dos miembros de la Patrulla Águila, un instructor y una alumna, se ha recuperado parte de la normalidad que tenía este acto.

No obstante, el desarrollo íntegro del evento ha tenido lugar en el patio de Armas de la AGA, trasladándose a ese punto el homenaje a los caídos, mientras que no se ha celebrado el tradicional desfile por la avenida principal del recinto.

A diferencia del año anterior, hoy sí ha habido asistencia de familiares, que han llevado mascarilla y han guardado la distancia de seguridad entre los asientos.

Al acto han acudido numerosas autoridades civiles y militares, como el presidente de la comunidad, Fernando López Miras; el presidente de la Asamblea Regional de Murcia, Alberto Castillo; el delegado del Gobierno, José Vélez; la subsecretaria de Defensa, Amparo Valcarce, y el obispo de la Diócesis de Cartagena, José Manuel Lorca Planes.

El rey ha pasado revista al Escuadrón de Alumnos para después pasar al acto de acción de gracias oficiado por el vicario general castrense de España. Tras el relevo del abanderado, Felipe VI ha hecho entrega de los despachos a los número uno de cada promoción.

Después de dos años en el cargo de director de la AGA, el coronel Manuel de la Chica ha dado el relevo al coronel Pascual Soria, no sin antes pronunciar la última lección del curso.

En su alocución, De la Chica ha instado a los egresados a hacerse “merecedores del esfuerzo que se realizó” para su instrucción y en la que ha deseado al coronel Soria que sus “hombros sean lo suficientemente fuertes para aguantar cualquier cosa que tenga que suceder”.

Tras el acto de homenaje a los caídos, la Patrulla Águila ha dibujado la bandera de España en el cielo de San Javier y el acto ha finalizado con la rotura de filas por parte de Felipe VI y el tradicional lanzamiento de gorras de los oficiales.