Visto para sentencia el juicio contra el fotógrafo Kote Cabezudo en San Sebastián

El juicio contra el fotógrafo donostiarra Kote Cabezudo en San Sebastián, acusado de más de 32 delitos de índole sexual a 16 modelos que posaron para él, ha quedado visto para sentencia este miércoles. En el ejercicio de su derecho a decir la última palabra, el acusado ha reiterado la existencia de un "complot" de personas que le odian y que "no son precisamente las víctimas". El procesado ha afirmado que algunas testigos "han estado aleccionadas y han llegado a mentir" y ha subrayado que jamás realizó "acción alguna contra ninguna de las denunciantes que no haya sido consentida libremente con total colaboración".

En la misma línea se ha pronunciado la defensa del acusado en su informe final. Javier Sánchez ha pedido la absolución del acusado y ha sostenido que todo lo que se hacía en las sesiones de fotos era "consentido", con la colaboración de las modelos y la presencia de sus familiares. Y ha subrayado que "otro tema es que las modelos se hayan arrepentido" al conocer después que sus imágenes circulaban por internet. La defensa ha insistido en que "lo que pasó en ese momento fue con el consentimiento de todas las personas que por allí pasaron y con la tranquilidad y seguridad de que no iba a pasar nada que nadie quisiera, debido a la presencia de familiares cercanos en las sesiones de fotos".

La defensa ha señalado que las modelos acudían "voluntariamente, firmaban contratos, participaban y colaboraban activa y proactivamente" en las sesiones de fotos y "conocían perfectamente el material que se estaba haciendo", antes de indicar que en los contratos "se autorizaba la difusión de las imágenes en las webs" de Kote Cabezudo. Sobre la difusión maisva de las sesiones de fotos en diferenets webs pornográficas, la defensa asegura que no se ha probado que el acusado obtuviese "ningún beneficio económico con ellas".

En la vistilla posterior para decidir sobre la puesta en libertad o no y la posible prórroga de la prisión provisional para el acusado, el fiscal, Jorge Bermúdez, que solicita más de 250 años de cárcel para Cabezudo, y el letrado de la acusación particular, Mario Díez, que pide 2.627 años de cárcel, han aludido al "grave riesgo" que, a su juicio, supondría que el acusado pueda volver a publicar material que "reviva el sufrimiento" de sus presuntas víctimas o pueda fugarse.

La defensa ha rechazado el riesgo de fuga apelando al "arraigo" de Cabezudo a San Sebastián, donde viven su mujer y su hija, a que tiene retirado el pasaporte, al tiempo que ha sostenido que "no existe riesgo de destrucción de pruebas", se ha depositado una "fianza de 400.000 euros", y no cree que "haya más material de las modelos, ni que se le ocurriera publicarlo" en Internet.

El Tribunal dictará un auto sobre la posible prórroga de la prisión provisional antes del 4 de mayo, fecha en la que finaliza la prisión provisional decretada por esta causa