La moratoria aprobada por el Gobierno para presentar el concurso de acreedores termina el próximo 14 de marzo y los abogados especialistas esperan para entonces una gran avalancha de peticiones.

En diciembre se multiplicaron en un 300% este tipo de peticiones

El socio del Bufete Buades y abogado especialista en derecho concursal, Mateo Juan Gómez, ya está recibiendo numerosas peticiones en su despacho en relación a los concursos de acreedores. Juan ha explicado en COPE que en el mes de diciembre han multiplicado un 300% los encargos por este tipo de procedimientos que recuerda, son lentos.

Asegura Juan que mecanismos como el concurso express, que es la declaración de concurso y extinción o conclusión del mismo en la misma resolución, podría utilizase con más frecuencias en esta situación ya que ayudaría a la tramitación de estos concursos. ''La primera fase de un concurso, en función de su complejidad, puede dilatarse más de medio año.La siguiente fase puede ser de máximo un año, pero la realidad, por desgracia, es que muchas veces se sobrepasa ese plazo'', explica el abogado.

Desde el punto de vista de la insuficiencia de medios, Juan asegura que en Baleares no hay falta de administradores concursales. El problema es logístico y reside en que las islas cuentan con solo 3 juzgados de lo mercantil y todo concurso de empresa o empresario, tiene que tramitarse ante los jueces de estos juzgados. Allí, además de concurso de acreedores, tienen más materias, por lo que se podrá generar cierto tapón a partir del próximo 14 de marzo. ''No creo que el problema sea la falta de administradores concursales. El problema real va a ser la carga de trabajo que van a tener los juzgados'', asegura el abogado.

Segunda oportunidad

Los profesionales están a la expectativa de lo que ocurrirá y al margen del auge de los concursos de empresas, Juan ha recordado una herramienta interesante: el mecanismo d la segunda oportunidad. Se trata del concurso de la persona física y la posibilidad de exonerar sus deudas. ''La pandemia ha traido también una crisis a nivel de la unidad familiar y es conveniente que conozcan la existencia de esta figura que en un momento dado puede ser una verdadera salvación para el endeudamiento accidental y también para empresarios autónomos que se hayan visto desbordados por la situación. Para dejar de lado las deudas y poder volver a empezar'', concluye Juan.