La Iglesia de Menorca se moviliza ante la emergencia social de la falta de vivienda digna
Ante el grave problema de acceso a la vivienda el obispado de Menorca abre un fondo social aportando 100.000 euros

Monseñor Gerard Villalonga
Mallorca - Publicado el
2 min lectura
Ante el grave problema de acceso a la vivienda el obispado de Menorca abre un fondo social por una vivienda digna. La Iglesia de Menorca aportará 100.000 euros y hace una llamada a empresas y particulares para que colaboren como ya se hizo con el fondo de solidaridad que se creó con la pandemia en 2020 y que ahora se cierra.
Gracias a ello, en estos 4 años Cáritas Menorca ha gestionado 554 ayudas y casi 230.000 euros en donaciones a más de 390 familias menorquinas, beneficiando en conjunto a 632 residentes.
El obispo de Menorca, Monseñor Gerard Villalonga, explica que se trata de una nueva iniciativa para una emergencia social como es la vivienda.
Villalonga dice que es solo un granito de arena aunque espera obtener el respaldo de los menorquines "no tenemos una varita mágica para resolver todos los problemas pero queremos dar un valor testimonial y efectivo en la medida de nuestras posibilidades. Es un fondo abierto personas particulares asuman esta iniciativa y hagan donativos. La Iglesia comienza, la ayuda se multiplica y Cáritas administra".
aprovechar la experiencia del fondo creado en la pandemia
El objetivo del nuevo fondo, que gestionará Cáritas, es cubrir las ayudas económicas para que las familias puedan pagar los gastos de su casa, rehabilitar y ampliar las 3 viviendas sociales con las que cuenta esta ONG de la Iglesia en Menorca desde el 2012 que ofrece ahora 23 plazas. La intención es ampliarlas con 10 más.
La coordinadora de inclusión social y responsable de la ejecución del Fondo del Obispado, Mar Pons, explica que han observado que cada vez las personas que acogen en los pisos tiene más dificultades para encontrar un recurso alternativo, "lo que es más preocupante aquí en Menorca últimamente es la dificultad para encontrar una casa, una vivienda asequible, porque los precios se han disparado muchísimo y además cada vez hay menos pisos a disposición. En nuestros tres pisos la estancia pretende ser temporal, lo que pretendemos es dar un acompañamiento para que mejoren y encuentren recursos alternativos pero esto cada vez se está convirtiendo en una dificultad mayor. Les cuesta salir de nuestros pisos porque no encuentran recursos".
alquileres abusivos
El obispo de Menorca pone el foco en los alquileres abusivos que impiden a las familias y a los inmigrantes a poder llegar a fin de mes. "Si cobran algo más de 1.000 euros y el alquiler es de 900 euros o de 500 por una habitación y han de vivir, no pueden llegar a fin de mes. Hace falta mano de obra pero muchos han de abstenerse de venir porque el objetivo es venir para tener un futuro mejor y ayudar a sus familias, pero esta posibilidad queda cerrada totalmente", lamenta monseñor Villalonga.