El precio de la bombona de butano se dispara un 4,9% y alcanza su máximo histórico. Se sitúa en los 19,55 euros. Casi 20 euros por bombona que se suma al incremento del precio de la electricidad y del carburante por el que ya volvemos a pagar 2 euros por litro.

Todo ello, sumado a que la cesta de la compra se ha encarecido 500 euros anuales por hogar y por si fuera poco la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha afirmado que se producirá un incremento del gasto en algunos alimentos y productos para el hogar de "otros más de 500 euros al año" y en Baleares se encarecen hasta los precios de alquiler.

En definitiva, sube todo menos las nóminas. Por eso, desde Cáritas Mallorca, Marga Cortés, que es la responsable del área de Vivienda, alerta de que también por el incremento del precio de la bombona de butano habrá nuevas familias pidiendo ayuda y otras de ayuda ya cronificada.

Así es como afecta a las familias el encarecimiento generalizado del precio de la vida y, claro, el pedir ayuda no siempre es fácil. De hecho no es la primera vez que las entidades sociales alertan de los efectos de la crisis sobre la salud tanto física como mental de las personas que sufren sus efectos con mayor intensidad.

Marga Cortés, de Cáritas Mallorca, incide en la importancia de prestar ayuda psicológica a muchos de sus usuarios.

EL IMPACTO DE LA COVID

Cáritas Mallorca está, por cierto, elaborando su memoria anual que se espera puedan presentar en unas semanas, por lo que estaremos muy pendientes desde COPE.

Cabe recordar qie la COVID-19 ya paralizó el proceso de recuperación, trastocando todas las previsiones y cambiando los planes de desarrollo en todos los sectores socioeconómicos. Por ello, su impacto ha estado enfrentando a la sociedad a una serie de retos como: el incremento de la pobreza y la privación material, lo que conlleva un alto volumen de demandas de ayudas que van dirigidas a personas y familias que tienen serias dificultades para afrontar diversidad de situaciones.