Más de 200 funcionarios de Baleares reclaman frente a MUFACE soluciones para la atención sanitaria de los mutualistas
Los sindicatos reclaman soluciones urgentes para evitar el caos sanitario en Baleares

Protesta de funcionarios en Palma
Mallorca - Publicado el - Actualizado
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Más de 200 personas, convocadas por organizaciones sindicales como ANPE, UGT, CCOO y otras, se han manifestado este miércoles frente a la delegación territorial de MUFACE en Baleares para exigir un acuerdo entre el Gobierno y las aseguradoras que garantice una atención sanitaria de calidad para los empleados públicos de la comunidad.
En Baleares, los funcionarios suman más de 40.000 efectivos, de los cuales 18.000 están adscritos a entidades como DKV, Asisa o Adeslas para su asistencia sanitaria. Sin embargo, estas aseguradoras han rechazado las últimas condiciones planteadas por el Ministerio, dejando en el aire la continuidad de los conciertos.

Protesta en Palma
El sector docente, el más afectado
ANPE, sindicato mayoritario del ámbito educativo, ha subrayado que el sector docente es el más perjudicado por esta incertidumbre, ya que representa el grupo más numeroso con 15.000 profesionales. Bajo el lema "Nuestra salud no es una mercancía", los manifestantes han exigido soluciones inmediatas para evitar un colapso en el sistema sanitario público y garantizar la continuidad de la atención médica para los mutualistas.
“Si no se mantienen los conciertos con las aseguradoras actuales, la sanidad pública podría colapsar aún más y las listas de espera aumentarían considerablemente”, han advertido desde ANPE, reclamando además un plan a largo plazo que potencie el sistema público. Este plan debería permitir que, progresivamente, todos los empleados públicos sean atendidos por la Seguridad Social, reduciendo la dependencia del sector privado.
Críticas a las aseguradoras
Desde la unidad sindical se ha denunciado la actitud de las aseguradoras, calificándolas de "insaciables" por utilizar como argumento la supuesta “infrafinanciación” del modelo MUFACE para justificar su negativa a aceptar el pliego de condiciones. Además, se les acusa de prácticas de “selección de riesgos”, trasladando los casos más costosos al sistema público y poniendo en peligro la salud de los mutualistas.
Reclamo urgente al Gobierno
Los sindicatos han hecho un llamamiento al Gobierno para que alcance un acuerdo firme y satisfactorio con las aseguradoras. “Es esencial priorizar la salud de los empleados públicos y evitar el colapso de la sanidad pública”, han declarado, insistiendo en la necesidad de certezas para los más de 18.000 usuarios que dependen de este sistema en Baleares.
La protesta ha finalizado con un claro mensaje: “Nuestra salud no está en venta”, exigiendo soluciones concretas y definitivas que protejan los derechos sanitarios de los empleados públicos.