El botellón que no cesa

Decenas de jóvenes han protagonizado escenas de botellón en la Plaza de Portugal como ya ocurre en otros muchos puntos de la geografía gallega y española.

Ahora que ha descendido de manera notable la incidencia acumulada y el número de contagios miles de jóvenes se vuelven a concentrar en plazas y lugares de ocio para consumir alcohol. Uno de esos lugares, habitual desde hace años, es la plaza de Portugal, un punto muy céntrico de la ciudad muy próximo a la calle Urzáiz.

Parece, según lo visto en Vigo y en otras ciudades, que las medidas que se había establecido para el control del botellón -especialmente la prohibición de ocupar las plazas públicas donde se consume habitualmente alcohol de las 12 a a las 6 de la madrugada ha caido en el olvido y la vigilancia se ha relajado, al menos en la ciudad olívica.

Más allá del protocolo sanitario del ocio nocturno que pactaron la Xunta de Galicia y el sector, que amplía los aforos a un 75 por ciento en el interior en el nivel más alto de seguridad sanitaria, el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, anunció ayer en rueda de prensa que Galicia seguirá la senda de otras comunidades como Madrid y relajará alguna de sus medidas sanitarias. Así, el presidente gallego anticipó que los aforos se aumentarán con carácter genérico no solo en la hostelería sino también en otros espacios interiores como gimnasios o espacios de ocio. De todas maneras, esta ampliación de aforos queda pendiente del estudio y aprobación por parte del comité clínico que asesora a la Xunta en esta pandemia que se reunirá previsiblemente el martes a la tarde.