¿Por qué es malo beber alcohol en esta ola de calor? Un médico te lo explica
Los especialistas advierten que el alcohol favorece la deshidratación y puede agravar los efectos del calor durante el verano

Entrevista con el doctor Regueiro del Quirónsalud Miguel Domínguez (Pontevedra)
Pontevedra - Publicado el
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Con la llegada del verano y la subida de las temperaturas, aumentan las reuniones al aire libre y también el consumo de bebidas alcohólicas, bajo la falsa percepción de que pueden calmar la sed y refrescar el cuerpo. Sin embargo, profesionales de la salud advierten que esta práctica puede tener consecuencias perjudiciales, ya que el alcohol es un potente diurético que estimula la eliminación de líquidos e impide una correcta hidratación. El alcohol favorece la deshidratación
Durante los días de calor, el cuerpo pierde agua de forma natural mediante el sudor, mecanismo necesario para regular la temperatura interna. Si se consume alcohol, esta pérdida se intensifica, ya que interfiere en la producción de la hormona antidiurética, lo que provoca una mayor eliminación de orina.
Este fenómeno, sumado al calor, aumenta el riesgo de deshidratación, cuyos síntomas pueden incluir mareos, fatiga, confusión mental, presión baja o incluso vómitos. En casos graves, si no se detecta a tiempo, puede derivar en situaciones más complejas como golpes de calor. Recomendación: agua, siempre
Según el doctor Alejandro Regueiro, del Hospital Quirónsalud Miguel Domínguez, “la mejor fuente de hidratación es el agua. Las bebidas alcohólicas, lejos de refrescar, potencian la pérdida de líquidos y aumentan el riesgo de golpe de calor”.

Dr. Alejandro Regueiro
Desde el ámbito sanitario recomiendan evitar el alcohol como método de hidratación, especialmente en verano, y priorizar el consumo de agua y de alimentos ricos en líquidos como frutas. También se insiste en tener especial cuidado durante la actividad física o el tiempo al aire libre, cuando las temperaturas son elevadas. Señales de alerta
Si se presentan signos como sequedad bucal, dolor de cabeza, debilidad o confusión, es fundamental acudir a un centro médico para recibir atención profesional.
En definitiva, para disfrutar del verano sin poner en riesgo la salud, decir sí al agua y no al alcohol como método de hidratación es clave.