El alcalde de O Barco de Valdeorras afirma que "hay que alarmar a la población para hacer que tome todas las precauciones para frenar los contagios".

En declaraciones a COPE Valdeorras, Alfredo García señaló que confía que las nuevas restricciones que Sanidad ha impuesto en O Barco, y que han entrado en vigor la pasada medianoche, como la prohibición de celebrar reuniones de personas que no sean convivientes, sean el aldabonazo definitivo para hacer que los ciudadanos reflexionen y tomen todas las medidas para frenar los contagios de COVID-19.

Alfredo García reconoce que es muy difícil controlar que se cumplen todas las medidas, pero asegura que desde el ayuntamiento se ponen todos los medios posibles para ello, y recuerda que la Policía Municipal está haciendo seguimientos individuales de las familias con positivos de COVID-19, para vigilar que están cumpliendo la cuarentena y conminarles a que no salgan de los domicilios.

El comité clínico de la Consellería de Sanidade ha considerado conveniente reforzar las medidas de prevención para proteger la salud de la población en O Barco, donde la incidencia de los contagios es 6 veces superior a la del conjunto de Galicia. Las medidas para la población de esta localidad valdeorresa pasan por el límite al 50% en los aforos de los establecimientos comerciales, de restauración y hostelería -donde, además, está prohibido el consumo en barra-, así como en bibliotecas, academias, autoescuelas y centros privados de enseñanza no reglada.