El portavoz del grupo municipal del Partido Popular de Burela, Manuel Rouco, ha lamentado la "inoperancia del gobierno socialista" que pudo haber actuado para conservar la primera lancha de salvamento marítimo de la provincia, la Carmela.

"Hoy Burela tiene un poco menos de sí misma" por la "irresponsabilidad del gobierno del señor Llano que el único que hace es seguir viviendo de sus propias ensoñacións", manifestó el popular.

Rouco también recordó que "el ayuntamiento pudo haber adquirido la embarcación por un precio simbólico y, posteriormente, reubicarla en otro emplazamiento para conservar parte de la historia de nuestra villa".

De hecho, "en uno de los primero plenos del mandato, allá por el 2020, el grupo popular le aconsejó al gobierno del alcalde Llano que la reutilizara y le diera un buen uso a la lancha que estaba pudriéndose en la explanada del puerto de Burela".

Posible monumento en una rotonda

Los populares habían propuesto, por ejemplo, reubicarla como monumento en una de las rotondas de la villa o en alguno de sus parques.

Pero, "como tantas y tantas veces, el gobierno de Alfredo Llano consideró que la Carmela -conocida por este nombre en honor a su madrina, la condesa de Fenosa- no merecía ni un céntimo de inversión municipal para este menester, al contrario de como sí se hizo en otros ayuntamientos marineros de la costa gallega", indicó el popular.

"Burela, paseniñamente, no deja de ser desmantelada, tal y como le sucedió a la entrañable Carmela" concluyó Rouco.

Portos de Galicia señala al Concello

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Portos de Galicia también ha lamentado el despiece de la embarcación de salvamento de la Cruz Roja, que estaba instalada en el puerto de Burela como homenaje a la gente del mar, y aclara que fue necesaria su retirada de terrenos portuarios por cuestiones de seguridad.

El ente público ha subrayado que las gestiones para su retirada comenzaron hace años ante su estado de abandono y la ausencia de tareas de mantenimiento, lo que suponía un importante riesgo para los vehículos que estacionaban en sus cercanías y para las personas que paseaban por su entorno.

Portos estuvo en contacto permanente con la Cruz Roja -propietaria del barco- mientras la entidad mantenía conversaciones con la administración local y otros organismos con la finalidad de trasladarlo a otra localización o buscarle un uso alternativo.

En este sentido, la intervención del ente público se limitó a solicitar la retirada de la embarcación por cuestiones de seguridad y fue su propietario quien tomó la decisión de desguazarla.

El organismo autonómico lamenta que los contactos para garantizar la continuidad de la Carmela no dieran frutos, pues se trata de una embarcación histórica que entró en servicio en el año 1980 y que realizó importantes labores de rescate y salvamento marítimo en A Mariña en las décadas siguientes.