El portavoz del Grupo Municipal Popular, Daniel Vega, considera advierte de que “el gobierno local del BNG está creando malestar entre los funcionarios de los servicios administrativos del Ayuntamiento. Muchos ya se fueron y ninguno quiere venir”, considera.

Los populares pedirán explicaciones en el próximo pleno municipal al entender que “este mal ambiente de trabajo se debe al ego, prepotencia y a las actitudes chulescas del gobierno del BNG. Y las consecuencias de esta situación las pagamos todos los ribadenses”, advierte el portavoz. Además, quieren saber “por qué hay que echar mano de jubilados para realizar determinados trámites administrativos, algo que no ocurre en ningún Ayuntamiento de la Mariña”.

Servicios esenciales bajo mínimos

Vega señala, además, que “servicios esenciales para el funcionamiento de una administración están bajo mínimos en el Ayuntamiento de Ribadeo. Es el caso de intervención y secretaría, dos puestos que el Ayuntamiento de Ribadeo tiene compartidos con otros y, por lo tanto, la falta de estas figuras a tiempo completo va en detrimento de nuestro Ayuntamiento. Pero que hace el gobierno del BNG? Absolutamente nada”.

El portavoz del Grupo Municipal Popular recuerda que “el gobierno local nos trataba de mentirosos cuando advertíamos que se estaban pagando facturas y subvenciones con mucho retraso”; pero “el día a día demuestra que decíamos la verdad. El motivo del retraso en el pago de facturas y subvenciones se debe la que intervención y secretaría están muy pocos días en Ribadeo y, por lo tanto, no pueden avanzar en el trabajo”, explica.

¿Qué hace el ayuntamiento para atraer funcionarios?

Vega se pregunta “qué gestiones está haciendo el gobierno local del BNG para conseguir que vengan funcionarios a Ribadeo” toda vez que “habrá personal habilitado por el Gobierno del Estado” para realizar las funciones de intervención y secretaría y que “hay sueldos muy bien dotados económicamente en este Ayuntamiento”.

“La falta de acción del gobierno local del BNG” es para lo popular “una demostración de un gobierno que toca su fin, que no está centrado en el día a día -simplemente en la foto- y que van a rebufo constantemente. Están viendo cuantos concejales juntan para hacer una foto y repetirla 70 veces; pero no en la gestión del día a día”.