El alcalde de O Incio, Héctor Corujo, ha señalado que el brote detectado en la residencia de mayores de la capitalidad municipal, que afecta de momento a 65 usuarios y 4 empleados, “puede afectar a más municipios de la zona” debido a la procedencia y posibles contactos cercanos de los afectados.

En declaraciones a COPE Lugo, Corujo señaló que “hay muchos usuarios que no son de O Incio”, mientras que “la mayoría de trabajadores sí residen en el municipio”.

Por este motivo, el Sergas efectuará “cribados” y “rastreos” de todos los “contactos de trabajadores que hayan dado positivo” y de “familiares de usuarios con coronavirus que los hayan visitado en las últimas fechas”.

La noticia surgió el miércoles a mediodía, tras el positivo de una trabajadora del centro, que está gestionado por la Fundación San Rosendo.

A primera hora de esta mañana, el regidor se mostraba “alertado por la situación”, pero “moderadamente tranquilo” a la espera de los resultados de las más de 200 pruebas PCR efectuadas en las últimas horas, que finalmente arrojaron un resultado de 69 positivos.

“No lo esperaba, fue una sorpresa grande para mí y creo que también para el personal de las Consellerías de Sanidade y Política Social”.

Ante esta situación, Corujo avanzó que se “acentuarán las medidas de prevención y seguridad”, y que se mantiene a disposición de lo que dicten las autoridades sanitarias, en caso que que haya que “hacer seguimiento a alguna persona con efectivos de Protección Civil” o a través de otros medios.

El BNG pide una "intervención urgente" a la Xunta

La diputada lucense del Bloque Nacionalista Carme Aira ha pedido a la Xunta de Galicia que “intervenga con carácter de urgencia” la residencia de mayores de O Incio y que establezca un “protocolo para las personas más vulnerables” después de conocer la incidencia del brote de coronavirus detectado en el centro.

Aira también aprovechó para trasladar el “apoyo” de su formación a “las familias de usuarios” y al personal afectado.

La parlamentaria del BNG ha pedido asimismo a la Xunta que ofrezca “información detallada a las familias para que no se repita la situación de aislamiento vivida en otras residencias de mayores de Galicia”.

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La diputada nacionalista ha recordado que el BNG ya reclamó a la administración autonómica “un protocolo y plan de protección con medidas eficaces contra el aumento de los contagios”, por lo que ha mostrado su “preocupación” por el repunte.

Para Aira, la contratación de “dos personas en el HULA para el rastreo” resulta “insuficiente”, y ha criticado la “opacidad” sobre el número de “personas rastreadoras en la provincia de Lugo”.

En este sentido, ha añadido tener constancia del “desconocimiento” de la gerencia del Sergas en Lugo sobre el “número de personas rastreadoras dependientes de la Consellería de Sanidade destinadas en la provincia” y su “categoría profesional”.

La parlamentaria nacionalista ha señalado que la situación en la residencia de O Incio constata “la incapacidad de la Xunta” ante la “segunda ola de contagios” por el virus covid-19, por lo que ha pedido al Gobierno gallego “que actúe para frenar el repunte del virus en este centro”.

Restricciones en localidades cercanas

En otros municipios de la zona sur de Lugo han decidido tomar medidas ante los brotes registrados en O Incio y Monforte de Lemos.

El alcalde de Sober, Luis Fernández Guitián, ha publicado un bando municipal en el que informa del cierre del gimnasio municipal y la finalización de la temporada de las piscinas municipales.

Asimismo, la banda de música de la localidad ha suspendido sus próximas actuaciones.

Por su parte, el regidor de A Pobra do Brollón, Xosé Lois Maceda, ha reducido el servicio de atención en el hogar y ha suspendido la realización de eventos culturales como “medidas cautelares” ante la incidencia del coronavirus.

Ambos regidores han pedido también “responsabilidad, tranquilidad y precaución” a los vecinos.