Los diputados del grupo del Partido Popular abandonaron hoy el pleno de la Diputación de Lugo después de que el gobierno provincial rechazase “reprobar” al presidente de la institución, el socialista José Tomé, por lo que los populares calificaron como unas “declaraciones machistas” relacionadas con la presidenta provincial del PP, Elena Candia.

El portavoz de los populares, Javier Castiñeira, dijo que socialistas y nacionalistas “perdieron un buen momento” para reprobar las declaraciones de Tomé, mientras que “el propio presidente no habló ni una sola palabra” en el pleno “de este asunto”.

Desde su punto de vista, hubiese sido bueno para la institución que Tomé “rectificase sus palabras en público, en el pleno”, pero en vez de hacerlo, los socialistas optaron por buscar “el enfrentamiento”.

“Lo lamentamos. Esta no es la imagen que queríamos dar”, dijo Castiñeira.

Una ironía

El presidente de la Diputación dijo antes de comenzar el pleno que ya le había pedido “disculpas” a quien se pudiese haber sentido “ofendido” por unas palabras que él calificó como “una ironía por la batukada que montaron los diputados populares” en la Praza de San Marcos, en un acto para denunciar un supuesto reparto “sectario” de los fondos populares.

A su juicio, toda esta situación es un “rebumbio inventado por el Partido Popular” para “tapar sus propios escándalos”.

Sin embargo, en relación con las disculpas pedidas por Tomé, Castiñeira dijo que “no le sirvieron ni a su propio partido”, además de recordarle que “rectificar es de sabios” y que “debería hacerlo en el pleno”.