La buena evolución de la pandemia en el municipio de Lugo en los últimos días ha invitado al comité clínico que asesora a la Xunta de Galicia a rebajar las restricciones en la capital lucense, que pasa del nivel medio-alto al nivel medio.
En esa decisión ha tenido que ver, entre otros factores, que la incidencia acumulada a catorce días baja de los 150 casos, pero también que el porcentaje de pruebas PCR positivas se ha situado ligeramente por debajo del 5%, según ha informado la directora Xeral de Saúde, Carmen Durán.
Aunque se mantiene el cierre perimetral del municipio, se alivian las restricciones para el sector de la hostelería.
Por lo tanto, los bares, restaurantes y cafeterías podrán abrir hasta las 23:00 horas, cuando en la última semana solo podían hacerlo hasta las 17:00 horas.
Además, el aforo en el interior de los establecimientos aumenta hasta el 40% y se permiten las reuniones de hasta seis personas.
El toque de queda sigue establecido en las 23:00 horas.
En todo caso, el comité clínico ha incidido en la necesidad de mantener la “prudencia”.