Acusan a un hombre en Ferrol por coacciones y daños a su expareja en presencia de sus hijos
Pide un año de prisión y prohibición de acercamiento y comunicación, además de multa por destrozar el móvil de la víctima

Foto de archivo de la calle Luis Riquesens de Caranza
Ferrol - Publicado el
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La Fiscalía de Ferrol ha presentado escrito de acusación contra un hombre por presuntos delitos de coacciones leves agravadas y daños leves, tras un incidente ocurrido el pasado 7 de mayo en el domicilio que compartía con su expareja, en la calle Luis Riquesens, en el barrio de Caranza.
El juicio estaba programado para este miércoles, 21 de mayo, en el Juzgado de lo Penal número 2 de Ferrol.
Según el escrito de acusación, sobre las 18:00 horas del citado día, el encausado, movido por el ánimo de impedir la libertad deambulatoria de la mujer, se dirigió al hogar familiar para reclamarle documentación personal.
Ante el estado de agitación del hombre, la mujer decidió bajar al portal para entregarle los documentos. Fue entonces cuando, presuntamente, el acusado se abalanzó sobre ella para evitar que se marchara, increpándola de forma desmedida por la ruptura de la relación que él no aceptaba, profiriendo expresiones como "o te mato o me mato yo".
En un momento posterior, y también con la intención de impedir la comunicación de la agredida con una tercera persona a la que el hombre culpaba de la ruptura, y con ánimo de menoscabar su propiedad, le arrebató el teléfono móvil de las manos y lo arrojó al suelo, destrozándolo. El teléfono móvil, según la Fiscalía, era el único medio de comunicación y contacto familiar de la víctima. Un peritaje tasó el valor del terminal en 258,41 euros.
Los hechos fueron presenciados por los dos hijos menores de edad que la pareja tiene en común, de tres y un año), así como por una tercera hija de la mujer, quienes se encontraban asomados a la ventana de la vivienda.
ORDEN DE ALEJAMIENTO
Tras los hechos, el Juzgado de Instrucción número 2 de Ferrol dictó un auto, el 8 de mayo de 2025, imponiendo a hombre la prohibición de aproximarse a menos de 200 metros de la mujer, ya sea en su domicilio, lugar de trabajo o cualquier otro lugar donde se encuentre, así como la prohibición de comunicarse con ella por cualquier medio, directa o indirectamente. Esta medida cautelar permanece en vigor.
La Fiscalía considera que estos hechos son constitutivos de un delito de coacciones leves sobre la mujer agravado por haberse cometido en presencia de menores, previsto el Código Penal, por lo que pide para el acusado un año de cárcel y una multa de 900 euros, además de la privación del derecho a la tenencia y porte de armas por un período de 3 años, la prohibición de aproximación a la mujer a una distancia inferior a 200 metros y la prohibición de comunicación con ella por cualquier medio, ambas por un período superior de tres años, además de la cantidad de 258,41 euros por los daños causados al teléfono móvil.