El Ayuntamiento de As Pontes, a través del Plan Único de la Diputación de A Coruña, activa un ambicioso proyecto de 569.608 euros para reurbanizar la plaza de América, un espacio situado en el casco urbano y que está ligado a la historia reciente de la localidad.

La plaza de América nace de la mano de la construcción de la escuela, el actual CEIP Santa María, en el año 1929, gracias a la aportación de fondos por parte de la “Sociedad de Instrucción Naturales del Ayuntamiento de As Pontes de García Rodríguez”, formada por emigrantes ponteses en La Habana (Cuba).

Con el paso del tiempo a plaza se fue transformando. En la década de los 80 tuvo lugar un cambio radical en la concepción del espacio, realizando una intervención que supuso la elevación del espacio en relación con las avenidas perimetrales, aprovechando el desnivel generado para construir un edificio semienterrdo, utilizado en origen como ‘Hogar de la tercera edad’ y que hoy alberga la ‘Biblioteca municipal Enrique Rivera Rouco’.

RETORNO A LOS ORÍGENES

Esta última intervención en la Plaza de América, que modificó su naturaleza original, hizo que salieran a la luz una serie de defectos como la falta de accesibilidad a causa de los desniveles generados, tanto internamente como con respeto a las vías perimetrales, así como la escasa funcionalidad que tiene por la carencia de mobiliario urbano y la falta de zonas de resguardo frente al sol y a la lluvia.

Por todo esto, el objetivo principal de la actuación, que está en proceso de licitación, es ordenar el ámbito en términos de funcionalidad, seguridad y accesibilidad atendiendo a criterios de calidad ambiental, de eficiencia energética y de sostenibilidad.

Según explicó el alcalde de As Pontes y presidente de la Diputación, Valentín González Formsoo, los ejes fundamentales de la propuesta para la plaza de América son, por una parte, la recuperación de los valores originales perdidos, como son el papel protagonista de la escuela o la relación con las calles perimetrales y el carácter de paseo del conocido en la villa como ‘Paseo de los Americanos’, y, por la otra, la creación de espacios útiles tanto para el uso diario como ámbito de ocio, así como para la celebración de eventos.

Así, la estrategia que se formula para volver a la configuración original de la plaza pasa por proceder a la demolición del edificio de la biblioteca municipal. Una vez suprimida esta barrera, la intención es que las vías perimetrales, recientemente urbanizadas, definan el relieve en el interior de la plaza mediante la extensión de las superficies, asimilando sus pendientes y estableciendo una plataforma a la misma cuota.