Abren 21 actas por drogas en un 'after' de Matogrande (A Coruña): "Orinan en cualquier sitio, a plena luz del día y donde sea"

La Policía Local realiza una nueva inspección rutinaria del ocio nocturno, mientras la asociación vecinal aplaude las actuaciones contra este conflictivo local

Noela Bao

Coruña - Publicado el - Actualizado

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Hace unos días fue en el Orzán y, este lunes, le ha tocado a Matogrande. La Policía Local de A Coruña se ha desplegado en el pub Ginger, un conocido after situado en el barrio herculino. El día después de Difuntos, se podría decir que ahí sí había 'zombies', ya que decenas de personas seguían todavía con la fiesta a plena luz del día.

Vista aérea del barrio de Matogrande

La actuación se ha saldado con 21 actas por posesión de drogas para autoconsumo levantadas a otros tantos asistentes. Se enmarca en un control rutinario sobre el ocio nocturno, según fuentes municipales.

 Vivir al lado de un 'after'  

Residentes de la zona aplauden esta actuación en un after que solo les trae problemas. La reapertura del local, que había permanecido un tiempo cerrado, ha vuelto a alterar la vida del barrio.

"Incluso con las ventanas cerradas, sabemos cuándo la gente está saliendo de ese after", algo que a veces se alarga hasta las 11h, explica a COPE la presidenta de la asociación vecinal. La presencia de los clientes, a menudo en mal estado por el consumo de alcohol y otras sustancias, hace que incluso los taxis eviten frecuentar el barrio los fines de semana, ya que "tuvieron varios conflictos con los taxistas y, para evitarlo, no se acercan".

"Orinan en cualquier sitio, a plena luz del día y donde sea, da igual el portal que los contenedores".

María Salgado

Presidenta de la Asociación Vecinal de Matogrande

Además de las molestias por el ruido, los vecinos se quejan del rastro que queda tras la fiesta. Según denuncia María Salgado, es habitual encontrarse con ruido, orines y suciedad. "Orinan en cualquier sitio, a plena luz del día y donde sea, da igual el portal que los contenedores".

También ha querido destacar que el perfil de los asistentes no se limita a un único grupo de edad: "Son jóvenes y no tan jóvenes", indica, ya que han visto desde la entidad vecinal alguno de "cuarentaypico" en el exterior del establecimiento.

 El clamor vecinal por el cierre  

Desde la asociación vecinal de Matogrande, cuya presidenta es María Salgado, respaldan los controles -"estamos encantados"- y mantienen la esperanza de que, algún día, se consiga el cierre definitivo del after.

Sin embargo, la propia dirigente vecinal entiende que un cierre permanente no es una tarea fácil. Salgado admite que este tipo de establecimientos conocen los trucos legales para evitarlo, afirmando que se las saben todas para poder burlar la ley.

Es un pub y tienen al lado una cafetería que comunica por dentro"

María Salgado

Presidenta de la Asociación vecinal de MAtogrande

"Es algo habitual, cierran y vuelven a abrir. Es un pub y tienen al lado una cafetería que comunica por dentro". De este modo, compatibilizan horarios legales y ofrecen una continuidad a la fiesta por la mañana sin necesidad, prácticamente, de moverse de sitio.

Un historial de conflictos

Este control policial se produce poco después de la reapertura del pub Ginger. El local estuvo cerrado tras una actuación policial el pasado mes de febrero que derivó en una batalla campal, con un balance de cuatro heridos y cinco detenidos.

Noela Bao

Bar La Tata en la calle Orzán de A Coruña

Este control se une al que se hizo hace unos días en la zona del Orzán. En el bar La Tata, este viernes, el control se saldó con dos actas por posesión de estupefacientes. En esta ocasión, unos 15 agentes del 092 accedieron al local desde la calle Socorro.

Este contenido ha sido creado por el equipo editorial con la asistencia de herramientas de IA.